Céntimo engañoso
Mi historia es así de simple. En una conocida gran superficie comercial donde se venden principalmente discos, libros y películas, yo me disponía a comprar un DVD. Éste costaba 23,99 euros (es necesario informar de que el 99 estaba puesto junto al 23 en forma de superíndice, de modo que podía pasar incluso inadvertido), yo me sonreí ante ese 99, ya de lo acostumbrada a ese truco, que seguramente tiene efecto. Pues cuando pagué el precio de ese producto (di 30 euros), me llevé una gran sorpresa cuando me devolvieron sólo 6. ¿Dónde estaba ese céntimo qué faltaba? Me dio vergüenza pedirlo, pero me dio mucho en lo que pensar. Un céntimo en realidad no significa nada, no me va a resolver mis problemas económicos. Pero ese céntimo significaba mucho. Y su ausencia significaba aún más.
