La inmobiliaria de Caixa Catalunya compra la sede de la firma Mecalux
Procam, la inmobiliaria del grupo Caixa Catalunya, ha comprado por una cifra cercana a 24 millones de euros la sede de la compañía de almacenamiento Mecalux en L'Hospitalet de Llobregat, según fuentes del sector inmobiliario. Esta compra de suelo es una de las más importantes que se ha realizado este año en el área de Barcelona y permitirá la promoción de más de 20.000 metros cuadrados de techo construido para el sector residencial, según aseguran los promotores locales consultados.
Ahora Procam buscará un socio para poder desarrollar el proyecto, en línea con la operatividad de una firma que espera cerrar el año 2002 con unas ventas de 250 millones de euros y que nunca promueve complejos inmobiliarios en solitario, sino en compañía de otros promotores.
Mecalux, con 2.186 empleados, es la cuarta compañía del sector del almacenamiento en Europa y está centrada en crecer en los mercados de la Unión Europea y Estados Unidos. La venta de esta planta, donde se encontraban la sede y las oficinas del grupo, y se ensamblaban las estanterías, servirá para compensar las pérdidas de Mecalux en este ejercicio, debidas básicamente a la combinación de la crisis argentina y al impacto de las inversiones en el sector de Internet.
El beneficio neto de Mecalux al cierre de 2001 ya fue de medio millón de euros, lo que supuso una caída del 98% respecto a los resultados del año anterior, según informó la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La planta de L'Hospitalet se creó en 1984, pero ya dos años después se creó la fábrica de Cornellà, con 35.000 metros cuadrados, actualmente en uso.
Por otra parte, Procam, la inmobiliaria del grupo Caixa Catalunya, impulsará en 2003 inversiones en dos nuevos proyectos de vivienda en Cantabria y Navarra, por valor de 196 millones de euros. Este dinero se destinará a promover complejos inmobiliarios cerca de Santander y Pamplona. Ya que realizará la inversión al 50% con socios locales, la filial de Caixa Catalunya sólo aportará la mitad de las fondos.
