Los jueces de Vitoria llevan un año sin decano por falta de candidatos

El puesto de decano de los jueces de Vitoria parece haberse convertido en una pieza poco deseada por los magistrados locales. Un año después de que abandonara el puesto el último titular de esta instancia judicial y después de dos convocatorias electorales, la última de ellas celebrada esta misma semana, la ausencia de candidatos deja el puesto en funciones en manos de la jueza con más antigüedad, la titular del juzgado de Menores Carmen Gómez Juarros.

Se trata de una situación atípica que se prolonga en el tiempo precisamente en un contexto político en donde los jueces no son ajenos a la amenaza terrorista. Sin embargo, desde el decanato en funciones rechazan que el origen del problema sea el miedo a ostentar un cargo relevante en la judicatura. "Es un puesto no jurisdiccional que no resulta atractivo para los profesionales", señala Carmen Gómez. El decano se encarga de coordinar a los profesionales de los 19 órganos judiciales unipersonales que existen en la capital alavesa, por lo que es un cargo que comporta una actividad fundamentalmente administrativa a la que además no le corresponde un relevo de funciones en localidades con menos de 40 juzgados unipersonales.

Por lo tanto, en una plaza como Vitoria, el juez decano debe simultanear este puesto con la titularidad de su propio juzgado, "lo que multiplica el tiempo de trabajo a cambio de una pequeña asignación suplementaria", indica Gómez.

Cadena de cambios

En el origen de esta situación está la cadena de cambios y traslados que se produjo el año pasado en la judicatura vitoriana. En el verano de 2001 dos magistrados de la Audiencia abandonaron sus puestos para trabajar en instancias de Madrid y Zaragoza. El entonces decano, Jesús Poncela, y su sustituto, Jaime Tapia, cubrieron estas vacantes y abrieron el periodo de interinidad que se ha prolongado hasta ahora.

Carmen Gómez Juarros, la profesional con más veteranía en la capital alavesa -trabaja en Vitoria desde el año 1993 en donde ha sido titular de salas de instrucción, de lo social, y actualmente en Menores- mantiene por ello el puesto en funciones. Está obligada a convocar elecciones cada seis meses como plazo máximo o en el momento en que algún compañero le anuncie su intención de presentarse al puesto.

En estos momentos, sólo uno de los 19 órganos judiciales unipersonales vitorianos está cubierto con un sustituto, una situación mejor que la de hace medio año cuando los juzgados sin magistrado titular eran cuatro.

La Ley Orgánica del Poder Judicial señala que debe existir decano en las poblaciones donde haya diez o más juzgados, y las elecciones se deben celebrar cada cuatro años o cuando cese el titular del puesto. En el caso de que no se presenten candidatos, ejercerá las funciones el juez o magistrado con mejor puesto en el escalafón.