_
_
_
_

Los empresarios sólo han contratado a 1.400 de los 2.285 inmigrantes previstos

El Gobierno ha adjudicado a la Comunidad de Madrid 2.910 puestos para el año que viene

Los empresarios madrileños sólo han contratado este año a 1.400 inmigrantes en sus países de origen, frente a los 2.285 previstos. CC OO y UGT creen que estos datos demuestran que el contingente de trabajadores extranjeros calculado por el Gobierno regional para 2002 "era exagerado". La mayoría ha llegado de Ecuador y la República Dominicana.

Más información
Una oferta dirigida sólo a extranjeros en sus países de origen

El consejero de Trabajo, Luis Peral, indica que la cifra "era sólo una estimación".Todos los años el Gobierno central permite contratar en origen a un número determinado de inmigrantes por comunidad autónoma para puestos que no se cubren con la población local. Es el llamado cupo o contingente que se determina a partir de las peticiones que realizan los sindicatos, la patronal y los servicios de empleo de cada comunidad. Madrid comenzó el año con un contingente cero, ya que sindicatos, patronal y Gobierno regional no llegaron a un acuerdo. Fue en junio cuando se decidió que hacía falta traer a 2.285 trabajadores extranjeros.

La mayoría de los 1.400 contratos firmados hasta ahora -el plazo expira el 31 de diciembre, por lo que no se esperan grandes cambios- son para la hostelería, el servicio doméstico y los grandes almacenes. Gran parte de los trabajadores ha llegado de Ecuador y República Dominicana y están ya desempeñando su tarea.

La decisión de acudir a otros países para buscar trabajadores extranjeros puede resultar paradógica habiendo una larga lista de parados en Madrid, y también una bolsa de inmigrantes a los que el propio Gobierno impide contratar al cerrarles las vías de regularización. Pero Luis Peral, el consejero de Trabajo, no lo ve así. "En todos los países europeos hay puestos que no se cubren con la población residente. Eso es lo que ha sucedido con los 1.400 resueltos a través del contingente", explica.

¿Tan malas son las condiciones de esos trabajos para que no las quieran los parados locales? El consejero niega que ése sea el motivo: "Son empleos regulados por convenios colectivos negociados por los sindicatos, así que no creo que sean tan precarios". "Si no se cubren con la población local, puede ser por múltiples razones; por ejemplo, porque algunos tienen horario nocturno", añade. "Además, en Madrid el desempleo ha descendido mucho, situándose en un 5% entre los hombres y en un 10% entre las mujeres", añade.

Regularización

Sobre la situación de los irregulares que ya viven aquí y a los que no se puede contratar, Peral reconoce que "seguirán así mientras no se modifique la normativa de inmigración, algo que no compete a las comunidades autónomas, sino al gobierno de la nación". "La solución es difícil, porque abrir ahora una regularización extraordinaria podría provocar un efecto llamada y queremos que los inmigrantes vengan en condiciones, no de cualquier manera", concluye Peral.

Fernando Crespo, responsable de inmigración de UGT Madrid, pinta una realidad más cruda: "Los puestos de trabajo que se cubren con el contingente suelen estar vacantes porque en ellos se cobra muy poco, a menudo de 500 a 600 euros mensuales". Y añade: "Los trabajadores madrileños o los inmigrantes ya asentados sólo aceptan esos empleos cuando no tienen nada mejor y los dejan en cuanto pueden. Sin embargo, alguien que reside en Ecuador o República Dominicana, con otro nivel de vida, puede pensar que esas cantidades son algo, aunque luego aquí se pegue el batacazo al comprobar que con 500 euros casi no tiene ni para alquilar una habitación. Además, para ellos lo principal no es el puesto en sí, sino poder emigrar con papeles a España".

Este representante sindical asegura que algunos de los primeros inmigrantes llegados con el contingente de este año "han estado buscando cobijo de una ONG a otra porque no les alcanzaba el dinero para el alojamiento". "El sector hostelero es el que más recurre al contingente porque, por sus condiciones laborales, tiene dificultades para contratar a autóctonos y tampoco puede recurrir a los irregulares ya que, al ser empleos de cara al público, tienen más control de la inspección", matiza Crespo.

Manuel Riesco, de CC OO, considera importante "hacer un seguimiento de los puestos cubiertos con el contingente 2002 para saber qué ocurre con el trabajador extranjero una vez que el contrato finaliza". "Está claro que los sectores laborales que demandan más trabajadores extranjeros son los que ofrecen peores condiciones laborales, como la hostelería, que está muy desregulado", apostilla.

"Es verdad que los contratos firmados deben acatar el convenio de cada sector, pero luego siempre hay letra menuda que no se cumple. Por ejemplo, horas extra que no se pagan como tales, y que un inmigrante recién llegado no exige porque ni sabe que tiene derecho a ello", explica Manuel Riesco.

Desde el pasado 1 de enero, los inmigrantes irregulares que viven en Madrid tienen cerradas todas las vías para obtener un permiso de trabajo y residencia. El único mecanismo de regularización vigente desde entonces es el contingente, pero a él no se pueden presentar los extranjeros que ya viven en España.

El objetivo de este sistema es, según explica el director general de ordenación de las migraciones, Antonio Maceda, "fomentar la contratación en origen para que los inmigrantes lleguen con unas garantías, no de forma irregular, endeudados y sin vivienda". Pero el contingente sólo está previsto para los inmigrantes con los que España ha firmado convenios (Ecuador, Colombia, República Dominicana, Rumania, Polonia y Marruecos).

La Comunidad de Madrid ha solicitado al Gobierno central que el próximo año permita venir a Madrid a 7.750 trabajadores extranjeros (5.650 para empleos estables y 2.100 temporales). Pero el Gobierno finalmente ha recortado mucho esa petición y, en principio, sólo autorizará la llegada de 2.910 inmigrantes, todo para trabajos estables (801 para servicios, en especial empleadas de hogar, 772 en hostelería, 608 en comercio, 271 en la construcción, 391 en transportes y 67 en la industria.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_