La Feria de Muestras de Bilbao se disuelve para ser sustituida por la sociedad del nuevo recinto en Barakaldo

La Feria Internacional de Muestras de Bilbao acordó ayer su disolución para que su actividad sea asumida por la sociedad Bilbao Exhibition Centre, encargada de gestionar las obras del nuevo recinto ferial en Barakaldo. La decisión fue adoptada en la asamblea celebrada con la presencia de los cuatro socios de la Feria de Bilbao: la Diputación de Vizcaya (37,35% del accionariado), el Ayuntamiento bilbaíno (31,85%), la Cámara de Comercio (21,9%) y el Gobierno vasco (9%). Los partidos de la oposición, representados en el consistorio y la Diputación, votaron en contra.

El traspaso de la gestión, que será gradual hasta el 1 de enero de 2004 cuando se complete, implica que Bilbao se quede sin representación en la nueva feria. El consistorio de la capital vizcaína, merced a la mayoría de la oposición, se ha opuesto al nuevo proyecto en Barakaldo y ha rechazado entrar en la sociedad que gestiona el nuevo recinto ferial. Por ello, cuatro de los seis representantes del Ayuntamiento en la Feria de Bilbao rechazaron la disolución en la asamblea.

El acuerdo establece una compensación a Bilbao por el 31% de las acciones de las que se desprende, aunque no se ha cuantificado la cesión del negocio ni los beneficios de los terrenos en los que se asienta la actual feria, junto al campo de San Mamés. La recalificación de este suelo puede proporcionar muy importantes plusvalías y era la base de la operación de traslado, que se frustró por la minoría del equipo de gobierno nacionalista en el Ayuntamiento de la capital.

La inversión prevista para el nuevo recinto ferial en Barakaldo ronda los 400 millones y, ante la actual imposibilidad de obtener financiación con los terrenos de San Mamés, ha obligado a que el Gobierno vasco y la Diputación se endeuden en 600 millones de euros.

El portavoz del PSE, Dimas Sañudo, criticó la disolución de la sociedad de la actual Feria "porque no hay una reclamación de lo que supone la pérdida" de la sede ferial en Bilbao. "Es la crónica de una muerte anunciada", añadió. Sañudo recordó que "se había dicho que la Feria iba a tener mucho protagonismo en la gestión de la nueva. El alcalde, Iñaki Azkuna, ha hecho muy poco".