Las 4.000 asociaciones de Barcelona crearán una red para tener más influencia en las decisiones municipales

Las casi 4.000 asociaciones que funcionan actualmente en Barcelona se agruparán en una red de trabajo para aumentar su influencia en las decisiones municipales. Éste es uno de los objetivos fijados en el Primer Congreso de las Asociaciones de Barcelona, que, tras año y medio de debate, se clausuró el pasado sábado por la noche en las Cotxeres de Sants.

Con casi 1.000 participantes de 480 entidades, el congreso solicitó oficialmente al Ayuntamiento la elaboración de un plan estratégico que permita la puesta en marcha de propuestas como la de potenciar el voluntariado y establecer un marco fiscal equitativo. En total, se expusieron más de 200 conclusiones fruto de 90 reuniones sobre temas como la creación de un código ético, las relaciones con la Administración y la importancia de la coordinación entre el tejido asociativo y los demás organismos (empresas, colectivos profesionales, etcétera) que actúan sobre los campos de interés de las asociaciones. Otro de los puntos destacados fue el de la erradicación de la "cultura de la subvención" y la voluntad de encontrar fórmulas nuevas y eficaces de financiación.

Según datos de la concejalía de Participación Ciudadana y Solidaridad, más del 30% de los barceloneses pertenecen a alguna de las asociaciones existentes, que abarcan campos tan diversos como el ecologismo, el movimiento vecinal, las agrupaciones excursionistas y la lucha contra el sida. Y es que la larga tradición asociativa de Barcelona, que se remonta dos siglos atrás, vivió un nuevo boom en la década de 1990, a raíz de la proliferación de ONG y las asociaciones que surgieron tras los Juegos Olímpicos. "Ante esta situación, creímos que era necesario crear un espacio común para compartir experiencias, tanto a nivel técnico como político", explica David Cárceles, vicepresidente del Consejo Municipal de Asociaciones de Barcelona y miembro de SOS Racismo, para quien "está claro que muchas asociaciones trabajan en el mismo ámbito, por lo que la creación de una red estable puede multiplicar la efectividad de su labor".

Apoyo al Fòrum

El alcalde de Barcelona, Joan Clos, que pronunció el discurso de clausura del congreso, se congratuló de la "inmensa vitalidad social de la ciudad" y llamó a las asociaciones a participar activamente en los fastos del Fòrum de les Cultures 2004. "Me gustaría contar vosotros en este gran acto que quiere celebrar la diversidad y en el que vosotros, con la experiencia de vuestro trabajo cotidiano con toda clases de personas, tenéis mucho que contar", señaló Clos. El ruego del alcalde tiene como telón de fondo la renuncia de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB) a apoyar la gran cita de 2004.

Por otra parte, Joan Clos recordó que el consistorio que preside aprobó el pasado 22 de noviembre nuevas normas de participación para mejorar el diálogo con la ciudadanía, de forma que los proyectos importantes deberán incluir una memoria de participación ciudadana para ser aprobados, además de la creación de un consejo para debatir los problemas de la ciudad. "Nuestro inmenso capital asociativo da más valor a la democracia, porque fomenta la representación de los intereses de todos", concluyó.