El alcalde socialista de Alcalá tratará de derrocar hoy al secretario general del PSOE en la localidad

El PSOE alcalaíno librará hoy, a seis meses de las elecciones municipales, una dura batalla interna. 318 militantes socialistas han pedido que el comité ejecutivo local, encabezado por el secretario general, Miguel Buenestado, se someta a una moción de censura, que decidirá si agota su mandato, que se extiende más allá de mayo de 2003. El comité juega un papel fundamental en, entre otras cuestiones, la confección de las listas electorales o el diseño de la campaña. Detrás de la moción está el entorno del alcalde y candidato a la reelección, Manuel Peinado, según estrechos colaboradores del mismo.

La moción de censura es una figura contemplada en los estatutos del PSOE para relevar a una ejecutiva entre congresos y es necesario avalar su petición con las firmas del 30% de los militantes, según Buenestado. Primero, se elige una mesa, formada por tres personas, para presidir la reunión. Después del debate, con intervenciones a favor y en contra de la moción de censura, se abrirán las urnas para que los militantes voten. Según Buenestado, hay 691 militantes con derecho a voto.

La petición de moción de censura ha sido secundada, además de por colaboradores y el entorno más cercano al alcalde, por el sector guerrista y el ex alcalde Arsenio Lope Huerta. Si ganan, los integrantes de la mesa que habrá presidido la jornada se constituirán en junta gestora. Y habrán de convocar elecciones para elegir a un nuevo comité ejecutivo en el plazo de un mes. Los promotores de la moción declinaron hacer declaraciones. En una carta a los militantes mencionaban como argumentos el socavamiento de la imagen pública del equipo de gobierno municipal por parte del comité ejecutivo, la falta de participación de la militancia en la agrupación y la falta de presencia pública de ésta en la sociedad.

Fuentes del comité ejecutivo, formado por 23 personas, afirman que si sale no a la moción de censura, el que debería dimitir sería Peinado. "No entiendo el porqué de esta medida tan inoportuna en pre-campaña , cuando hace cinco meses el 85 % de los militantes votó a favor de la gestión del comité ejecutivo. Claro que el gabinete de alcaldía ha afiliado a 200 personas en los dos últimos meses. Creo que el objetivo es decidir la lista de las municipales", manifestó Buenestado. Éste fue el mentor de Peinado en la anterior campaña electoral, pero tras los comicios sus relaciones se enrarecieron. Peinado retiró sus actas a dos ediles socialistas, uno de ellos muy cercano al secretario general, y Buenestado los defendió, prodigando críticas al alcalde y su gestión en los medios de comunicación locales.

La pasada primavera, Buenestado recabó las firmas necesarias para presentarse a las primarias de su partido y disputar a Peinado la cabecera de lista para 2003, pero en el último momento se retiró porque la Ejecutiva se lo pidió para no dar imagen de división.