_
_
_
_

La película sobre la emigración cubana 'Nada más' opta al Colón de Oro

El director chileno Andrés Wood presenta 'La fiebre del loco' fuera de concurso

La película cubana Nada más, de Juan Carlos Cremata, que anoche se proyectó en la sección a concurso del 28º Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, aborda el dilema de numerosos ciudadanos de la isla sobre si huir o no del país en busca de una vida mejor. Se trata de una película de fondo poético, según los autores, rodada en blanco y negro, que utiliza elementos del cómic y del cine mudo para realizar una suave crítica, entre otras cosas, de la burocracia existente en Cuba.

Al productor de la cinta, Grisel González, no le interesa nada hablar sobre los límites de la libertad de expresión que hay en Cuba. Ni de nada polémico. Ayer, cuando se le preguntó sobre ese asunto, se limitó a decir: 'Yo he venido a Huelva para hablar de cine, no de política. Si ustedes lo prefieren, siento aquí a un político de Cuba y ustedes tratan lo que quieran con él'.

La protagonista, Thais Valdés, una actriz que borda, según los críticos, su enigmático personaje, siempre al borde de la locura, la soledad y la incertidumbre, tiene una cosa clara: 'El objetivo de cualquier actor de Cuba consiste en salir a trabajar fuera de la isla, como hace, por ejemplo, Mirta Ibarra'.

Nada más, rodada con un presupuesto de un millón y medio de euros, cuenta con la participación de Canal Plus y de TVE. La cinta utiliza elementos de animación, todos ellos en color, que contrastan con el tono en blanco y negro de la película, que se desarrolla en los límites de la realidad y la fantasía. La cinta cuenta con la colaboración especial de Daysi Granados y de Asunción Balaguer.

A Thais Valdés le ha gustado, sobre todo, que el personaje de la protagonista se escribiera especialmente para ella. 'Me gustó que me propusieran un personaje hecho para mí. Considero que mi personaje tiene bastante que ver con intereses, aspiraciones y frustraciones de mi propia vida. Fue un placer trabajar con este director', afirmó.

Ayer también se presentó la película chilena La fiebre del loco, de Andrés Wood, que participa en la sección Rábida, fuera de concurso. El guionista, Gilberto Villarroel, de 38 años, es un periodista que durante años vivió la extraña locura que se desata cada año en una pequeña localidad del sur de Chile durante los escasos días en los que se autoriza la captura del loco, un molusco al que los japoneses atribuyen extraños poderes afrodisíacos. 'Llega a esa caleta gente de todo el mundo, especialmente japoneses, y centenares de prostitutas, todos dispuestos a conseguir dinero fácil y rápido, como en la época de la fiebre del oro de California. Todos quieren vender, extraer y especular, lo más alto posible, con el precio del loco. Es el sueño de hacerse rico de un día para otro, explicó ayer Gilberto Villarroel.

Esta película ha sido seleccionada para representar a Chile en la gala de los Premios Goya. Además, el próximo 22 de noviembre está previsto su estreno en España.

'Madame Satá'

La otra cinta a concurso que se proyectó ayer es Madame Satá, una producción brasileña, realizada con un millón doscientos mil euros, sobre la peripecia de un travesti, que vivió en la década de los treinta y ha hecho leyenda en su país.

'En parte puede considerarse una historia sobre los sueños frustados. Es la vida de un transformista que adora a una actriz y quiere convertirse en ella. Es una persona bisexual que vive con una mujer, con la que tuvo varios hijos. Se convierte en amante de un chulo con los hombros anchos descargador de barcos que lo maltrata. La policía siempre estuvo detrás de ese transformista, hasta que finalmente lo detuvieron y lo llevaron a la cárcel porque mató a un tipo que estaba insultando a un homosexual', explicó ayer Donald Ramos, productor de la cinta.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_