La policía ya tiene 'sospechosos' en el caso de las bombas de Vigo

Los agentes del caso de las bombas de Vigo, cuya explosión mató a dos personas y dejó heridas a otras dos, están investigando a 'sospechosos' de haber perpetrado el crimen. El director general de la Policía, Agustín Díaz de Mera, confirmó ayer que ya se dispone de 'muchas pistas' sobre la autoría de los atentados, aunque por el momento se desconoce el móvil exacto. Eso sí, descartó que las víctimas fueran elegidas al azar.

Las investigaciones sobre los dos atentados con sendas bombas que el pasado 5 de noviembre costaron la vida a Vicente Lemos, directivo de Pescanova, y a su esposa, Rosa Gil, y dejaron malherido al bancario Luis Ferreira y a su hijo de 12 años continúan avanzando.

Tras el desconcierto inicial por la falta de un móvil claro, la escasísima relación entre ambas familias y la ausencia de un pasado oscuro de las víctimas, el equipo multidisciplinar de la policía encargado de las investigaciones empieza a ver una luz que permitiría una 'pronta' solución del misterioso caso.

Díaz de Mera, quien se ha implicado personalmente en las pesquisas, aseguró ayer durante una entrevista en Antena 3 Televisión que la policía ya tiene 'sospechosos' de los crímenes. Se trataría de 'uno o varios individuos' que 'sabían lo que hacían'. Es decir: que quien colocó las bombas de pólvora prensada camufladas en bolsas negras de basura cerradas rellenas de papel no eligió a sus víctimas al azar, sino que las preparó para que les estallaran a los Ferreira y a Lemos cuando salieran solos de sus casas para trabajar.

'Hay una investigación sólida y profesional', aseguró el director general de la Policía en el programa El Primer Café, por lo que 'la solución del caso va a ser pronto'. Este parecer, explicó Díaz de Mera, 'no se sustenta en deseos sino en el conocimiento de hechos y de la realidad' y en el seguimiento de las 'muchas pistas' halladas por los investigadores.

No obstante, todavía no está claro ni el móvil ni el nexo de unión entre ambas familias. Fuentes policiales insistieron en que, pese a que la investigación 'va por muy buen camino', falta acumular pruebas que permitan ir a por los sospechosos que citó Díaz de Mera y, sobre todo, encontrar un motivo.

'Lo que más perturba a la policía es la ausencia de móvil, porque sólo hay una coincidencia geográfica entre las dos bombas', aseguró el máximo dirigente policial. No obstante, los investigadores se inclinan por que el leit motiv del criminal o los criminales fue económico o laboral, por lo que se buscan datos tanto en Pescanova como en el Barclays de Vigo, donde trabajaba el herido, que permita establecer un hilo que anude a las víctimas. 'Hay varias vías de investigación abiertas, otras que se han cerrado definitivamente, por lo que el caso cada vez está más centrado', indicaron las fuentes policiales consultadas.

Los dos heridos en el atentado, Luis Ferreira y su hijo de 12 años, continúan internados en el Hospital do Meixoeiro de Vigo, recuperándose de las heridas que les provocó la explosión. El menor ha abandonado ya la Unidad de Reanimación y fue trasladado a una habitación junto a su padre. Los dos heridos evolucionan sin complicaciones importantes dentro de su gravedad.

El niño sufrió traumatismo abdominal con estallido intestinal y herida penetrante en la córnea del ojo derecho, mientras que su padre se recupera de una fractura incompleta en la tibia derecha y heridas por metralla en ambas piernas. Luis Ferreira está siendo sometido a curas diarias por las quemaduras de metralla que sufrió en ambas piernas.