Cónsul ausente
El funcionamiento del Consulado Italiano de Bilbao es muy deficiente en la actualidad. Un ejemplo: he hecho últimamente tres viajes hasta Bilbao, en horario normal de oficina de atención al público, para compulsar la fotocopia de un documento. Las dos primeras veces no estaban ni el cónsul ni su secretaria. La tercera vez, el pasado viernes, tampoco estaba el cónsul. Su secretaria y otras señoras que trabajan allí dicen que no pueden compulsar la fotocopia sin la presencia del cónsul. Asombroso. Estas señoras del gabinete privado de abogados que es ahora el consulado afirman que el cónsul no vendrá hasta el final de la semana que viene. Entonces, habrá terminado ya el plazo del empeño para el que necesito la fotocopia compulsada.
Los anteriores cónsules de Italia y su secretario ofrecían servicio de verdad. Ahora, con los nuevos, tenemos que desplazarnos hasta Madrid para obtenerlo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.