Annelisa M. Kilbourn, zoóloga
Annelisa M. Kilbourn, veterinaria británica experta en animales en libertad, que descubrió que los gorilas pueden morir del letal virus Ébola, falleció a los 35 años el pasado sábado cuando la avioneta en la que volaba se estrelló en la Reserva Natural de Lope, en Gabón. Kilbourn estaba investigando el brote de Ébola que se produjo en ese país el año pasado y su relación con la población indígena de gorilas.
A comienzos de este año, Kilbourn descubrió que el Ébola no sólo es una grave amenaza para los seres humanos, sino también para los gorilas en libertad. Encontró ejemplares de gorila muertos en la selva y estableció que su muerte se debía a la fiebre del Ébola.
Sus descubrimientos han tenido importantes implicaciones para la conservación de los primates africanos y para el estudio de la difusión de la enfermedad entre los humanos. Los científicos ya habían observado que un brote anterior de Ébola en esa misma zona, en 1996, había producido un brusco descenso de la población de gorilas, y los trabajos de Kilbourn han explicado ese descenso.
El descubrimiento de Kilbourn también ha puesto de relieve la importancia de proteger lo que se cree que es la mayor concentración de gorilas mundial que vive en el cercano Parque Nacional de Odzala (Congo), a unos 100 kilómetros de distancia de Gabón, controlando el contacto entre los gorilas y los humanos y animales que puedan portar el virus. Antes de su muerte, Kilbourn trabajaba en la protección de la salud de esos animales.
Por otro lado, el descubrimiento de la vulnerabilidad al Ébola de los gorilas, además de chimpancés y otros simios, implica que la caza y la ingesta de los primates infectados es una de las formas de difusión de la enfermedad. El Ébola es una enfermedad contagiosa tropical mal conocida con brotes ocasionales en diversas zonas de África y sin cura conocida. La enfermedad puede causar la licuefacción de los órganos internos: la tasa de mortalidad en humanos es del 70%.
Annelisa Marcelle Kibourn nació el 27 de junio de 1967 en Zúrich. De nacionalidad británica, estudió ecología y biología ambiental en la Universiad de Connecticut (EE UU) en 1990 y se graduó en veterinaria en la Universidad de Tufts en 1996. De 1996 a 1998 trabajó en Malaisia con una beca de la Sociedad para la Conservación de la Vida Salvaje, colaborando en la protección de orangutanes y elefantes en libertad. Tras completar ese proyecto trabajó durante dos años en el zoo del Parque Lincoln y en el acuario Shedd de Chicago. Posteriormente aceptó un cargo permanente en el Shedd, pero también colaboró en el proyecto SOS Rhino para salvar a los rinocerontes de Borneo, y con la Sociedad para la Conservación de la Vida Salvaje en África central.-
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