Las regiones del eje atlántico se alían para tratar de agilizar la construcción del TAV

Las regiones del sudeste atántico europeo se reunieron ayer en Bilbao para impulsar el tren de alta velocidad (TAV) de forma coordinada. Los participantes en el encuentro, reunidos en un foro de presión, decidieron aunar esfuerzos para presionar a las instituciones europeas, a Madrid, a París y a Lisboa y hacer realidad una infraestructura esencial para 'el bienestar de los ciudadanos', en palabras del lehendakari, Juan José Ibarretxe. El presidente de la región francesa de Aquitania, Alain Rousset, aseguró que están buscando una fórmula nueva de financiación para el tramo Burdeos-Irún.

Ibarretxe señaló que el TAV que debe conectar Euskadi con Europa 'es un proyecto de enorme transcendencia para el desarrollo económico y social de la sociedad vasca'. El lehendakari hizo estas declaraciones tras asistir a la junta general de la Asociación Prioridad TAV Sur Europa Atlántica, que reúne a 12 regiones de Francia, España y Portugal y fue creada en julio pasado para impulsar la construcción de la red ferroviaria de alta velocidad.

En un encuentro previo con el presidente de Aquitania, promotor principal de esta asociación, Ibarretxe anunció que su Gabinete está decidido a 'comenzar con este proyecto' porque 'no podemos aguantar más el retraso'. Inicialmente, el Gobierno vasco tenía previsto empezar la Y vasca en 2001. Sin embargo, la red ferrociaria de alta velocidad que unirá en media hora las tres capitales vascas es el tramo más retrasado de los ocho que están previsto construir en España.

Precisamente ayer, el Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF) sacó a concurso la redacción de los proyectos de construcción de los tramos de la Y vasca Urnieta-Hernani y Basauri-Bilbao por un importe de 1,5 millones de euros y 900.000 euros, respectivamente. El proyecto para terminar los 180 kilómetros de línea férrea costará unos 22 millones de euros, y el Gobierno vasco está dispuesto a comenzar en 2003 las obras

Ibarretxe informó de que los contactos con el Gobierno central sobre esta infraestructura están muy avanzados y que están preparando un convenio para acelerar su tramitación. Con esta finalidad se reunieron ayer en Bilbao los miembros de la citada asociación, cuyo principal objetivo es presionar a sus gobiernos centrales para que se agilice el proceso de conexión de la cornisa cantábrica con el centro de Europa y el eje mediterráneo mediante la red ferroviaria.

La importancia de este proyecto transfronterizo también fue destacada por Rousset, quien señaló que el tráfico de camiones por la frontera francoespañola es dos veces superior a la del paso entre Italia y Francia. Además señaló que las previsiones de incremento de tráfico son de un 10% al año, con lo que a corto plazo las carreteras quedarán saturadas.