Dos glorietas del Parque de María Luisa sufren pintadas tras ser restauradas

Dos de las glorietas del Parque de María Luisa de Sevilla, las dedicadas a los hermanos Álvarez Quintero y a Ofelia Nieto, amanecieron el pasado sábado pintadas con graffitis, apenas una semana después de que se presentara públicamente la restauración de las 21 glorietas de estos jardines. Las pintadas afectan a los bancos, los azulejos, las estatuas e incluso el suelo de los monumentos. La restauración de las 21 glorietas ha durado 18 meses y ha costado 1,7 millones de euros.

Según la delegada municipal de Parque y Jardines, la andalucista Isabel Guerra-Librero, quien calificó de 'graves' los destrozos, un equipo técnico evaluará el alcance de los daños en los próximos días para preparar de nuevo su restauración. Guerra-Librero ya advirtió el pasado 21 de octubre, cuando se dieron por terminadas las obras, que aquella actuación podría resultar 'inútil' si no se incrementaba la vigilancia policial en el recinto y vaticinó nuevos destrozos ante los que, dijo, el Ayuntamiento actuaría con premura. 'Llegará un momento en que los vándalos se cansen de destrozar', subrayó.

En la actualidad estos jardines cuentan con tres cuidadores de parques, a los que se suman una pareja de vigilantes de seguridad, un dispositivo que, según la delegada, 'no es suficiente'. Guerra-Librero pidió vigilancia policial permanente y aseguró que ha remitido la relación de actos vandálicos a la delegación de Seguridad Ciudadana, pero que desde allí le insisten en que no hay policías suficientes para cubrir este servicio.

El delegado de Seguridad Ciudadana, el socialista José Gallardo, explicó ayer que la Policía Local 'entra y sale' de todos los parques de Sevilla, pero recordó que hay una empresa de seguridad 'que cobra por' vigilar el de María Luisa. 'Me llama mucho la atención que haya parques que no se cierren por la noche', subrayó.

Durante el año y medio que duró la restauración de las 21 glorietas, se produjeron ya una decena de actos vandálicos que retrasaron las obras y que, según un informe de la empresa encargada de los arreglos, Tragsa, se saldaron con el robo y el destrozo de azulejos por valor de 5.400 euros.

Otro informe técnico, el encargado a la jefe de sección de proyectos y obras, advierte incluso que mantener el 'estado de desatención' en el que se encuentra el parque sería equiparable 'a dejar el Museo de Bellas Artes abierto y sin vigilancia'.