La juez aprueba el pacto de Microsoft con el Gobierno

La decisión sólo endurece algunos de los compromisos incluidos en el pacto que se cerró hace casi un año. Entre otras obligaciones, a partir de ahora Microsoft deberá desvelar ciertas tecnologías informáticas a terceras compañías con tiempo y explicaciones suficientes como para que puedan desarrollar productos competitivos similares a los que Microsoft incorpora a sus sistemas operativos.

También se fija una supervisión independiente sobre las prácticas de Microsoft durante un periodo de cinco años y se establecen límites en la negociación de contratos con las compañías fabricantes de ordenadores. Microsoft deberá permitir que los usuarios puedan eliminar voluntariamente algunos de sus programas de Windows.

'Este tribunal está satisfecho de que las partes hayan llegado a un acuerdo que sirve al interés del público', dice la juez Colleen Kollar-Kotelly en su decisión, publicada justo al cierre de los mercados estadounidenses.

Los nueve Estados que rechazaron el acuerdo no lo consideraban suficientemente estricto. Entre los que no lo aceptaban estaban dos que albergan las sedes de algunas de las empresas del sector informático, California y Massachusetts. Aunque los fiscales no incluidos pueden recurrir la decisión, la juez desmontó algunas de sus propuestas sancionadoras. Al alabar el acuerdo y estimar suficientes las sanciones que Microsoft acepta, el recurso tiene difícil salida en tribunales superiores.