Solicitada la suspensión del expediente sobre el asalto al Rectorado
El abogado de Manuel Bernabé Cañadas, uno de los cinco estudiantes expedientados por la Universidad de Sevilla por su implicación en el asalto al rectorado de la institución el pasado 8 de febrero, solicitó ayer al rector de la Hispalense, Miguel Florencio, que paralice el proceso administrativo que se sigue contra estos cinco universitarios hasta que no exista una sentencia en el proceso penal que hay abierto por la misma causa.
Enrique Calderón, el abogado de Bernabé Cañadas, resaltó ayer la necesidad de que se paralice este proceso administrativo -en el que el instructor ha solicitado que se aplique como pena la expulsión perpetua de los expedientados- hasta que se emita un fallo y se levante a los cinco universitarios la suspensión cautelar de sus derechos como alumnos, medida que aplicó la Hispalense hace nueve meses. Calderón justificó esta petición argumentando que el fallo del proceso penal 'puede tardar dos o tres años', por lo que consideró injusto que los expedientados sigan cumpliendo esta sanción académica.
El abogado realizó esta petición después de que ayer presentase las alegaciones de su defendido al informe del instructor del caso, Fernando Betancourt. En ellas, Calderón solicita que se concreten los hechos de los que se acusa a su defendido al entender que la normativa por la que se rige la Universidad de Sevilla, que data de 1954, es 'muy antigua y no se ajusta a la realidad actual'.
Además, pidió que se admitan las pruebas exculpatorias que en su día les fueron denegadas al considerar que este rechazo deja en una situación de indefensión a su defendido.
