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El nuevo 'beatle'

Inglaterra enloquece con Wayne Rooney, que debutó y marcó con 16 años

José Sámano

Un mocoso del Everton llamado Wayne Rooney ha puesto patas arriba al fútbol británico durante la última semana. Rooney tenía 16 años cuando el sábado día 19 marcó en el último minuto un golazo desde más de 30 metros que tumbó al Arsenal por primera vez en 30 partidos consecutivos de Liga. Un gol que puso a Rooney en el mapa de tal forma que desde la BBC hasta el último diario sensacionalista le convirtieron en su icono de portada. Un gol que hizo que el Everton pusiera rápidamente a la venta su camiseta; que el reputado Arsène Wenger, técnico del Arsenal, le proclamara el mejor talento que han visto sus ojos desde su llegada al fútbol inglés, en 1996, y que la poderosa firma de intermediarios Proactive -en la que participa el histórico ex del Liverpool Kenny Dalglish- haya echado las redes sobre este rápido delantero, corto de estatura y muy habilidoso. 'Tiene la velocidad de Owen, la fuerza de Shearer y la pericia de Dalglish', según un crítico de una emisora británica.

El chico, que va al campo en bici, pasará de ganar 137 euros a la semana a 15.600

Cinco días después de enterrar el registro del Arsenal, Wayne, nacido el 24 de octubre de 1985 -año en el que Seaman, su víctima en la portería de los gunners, ya era profesional del Birmingham-, cumplió los 17 y armó un revuelo fenomenal: con esta edad ya podía firmar un contrato profesional. El Everton tenía todo preparado para sellar un acuerdo por tres años que le dispararía el sueldo desde los 137 euros semanales que mete en la hucha actualmente hasta los 15.600. El Everton lo tenía todo tan preparado que, como acto previo, mandó a Rooney de visita al hospital infantil de Alder Hey, en Liverpool, donde regaló a un niño enfermo de cáncer las botas con las que ejecutó a Seaman. Luego, los directivos del Everton se llevaron un chasco: Wayne aplazó la firma de su contrato. El chico ha cambiado de agentes y éstos tienen nuevos planes.

La marea provocada por Rooney ha sido extraordinaria. Su gol al Arsenal, un derechazo lleno de plomo tras un magnífico control orientado y una vez hecho un torniquete en las piernas del ex mallorquinista Lauren y el internacional Sol Campbell, le ha convertido en el anotador más joven de la Premier, registro que tenía ni más ni menos que Michael Owen, que hizo diana con el Liverpool con 17 años y 145 días. Que el Everton quitara un récord a su odiado vecino de Anfield fue celebrado de forma alborozada por toda la parroquia de Goodison Park, donde había referencias de Rooney desde el mismo día de su nacimiento, cuando su padre, Thomas, un ex boxeador de 39 años, le hizo socio de los toffees. Wayne fue al campo por primera vez con sólo seis meses cumplidos, en brazos de su madre, Jeannete, una asistente de cocina de 35 años del colegio De la Salle, que la nueva estrella abandonó hace medio año. Lo de la familia Rooney con el Everton es platónico: los hermanos de Wayne, Graham (14 años) y John (11) también juegan en los equipos inferiores. Por algo las ventanas de la casa de los Rooney, en el barrio de Croxteth, en la ciudad de los Beatles, desde el que Wayne va cada día en bici a entrenarse, están empapeladas con banderines evertonianos.

Wayne siempre ha sido todo un personaje en su barrio. Sobre todo desde que debutara con el equipo de un pub local con sólo siete años, tantos como goles anotó aquel día. Con nueve años se alistó en el Everton, que como es costumbre birló a su enemigo la gran promesa de la ciudad, como ya hiciera en su día con Fowler y McManaman, forjados en Goodison y triunfadores en Anfield. A los 11 años, Bob Pendleton, su descubridor, se dio el gustazo de ver cómo Rooney marcaba 72 goles en la Liga colegial. Su progresión fue supersónica, jamás perdió el apetito por el gol y, tras pulverizar récords en todas las categorías, su confirmación llegó en el Campeonato de Europa sub-17 de Dinamarca 2001. Rooney marcó cinco goles con la selección inglesa, que esta misma semana le ha convocado para la categoría sub-19.

Con su club sólo ha jugado dos partidos completos de las once veces que ha participado. Ayer, pese a su radiante puesta en escena frente al Arsenal, fue suplente. Sostiene David Moyes, su técnico, que 'su mente y su cuerpo aún no están del todo pulidos para las exigencias de la Premier, pero tiene tanto, tanto, talento...'

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Sobre la firma

José Sámano
Licenciado en Periodismo, se incorporó a EL PAÍS en 1990, diario en el que ha trabajado durante 25 años en la sección de Deportes, de la que fue Redactor Jefe entre 2006-2014 y 2018-2022. Ha cubierto seis Eurocopas, cuatro Mundiales y dos Juegos Olímpicos.

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