_
_
_
_
Reportaje:VICTORIA ACEBO & ÁNGEL ALONSO | ARQUITECTURAS

Una casa en el aire

Si las fotografías ofrecen una buena referencia de la casa, la visita a Urretxu confirma las expectativas. Victoria Acebo (Ponferrada, León, 1969) y Ángel Alonso (Santander, 1966), dos jóvenes arquitectos afincados en Madrid, han intervenido en la nueva urbanización de chalets de la localidad guipuzcoana con una caja gris para dos familias que mira a su interior, mientras que el exterior es reflejo de la propia Urretxu. Además es una intervención decidida en el paisaje urbano.

A pesar de la ubicación teóricamente periférica, el edificio ha sido reconocido, junto a otras nueve construcciones de toda España, en la última edición de la Muestra de Jóvenes Arquitectos Españoles, organizada por la Fundación Camuñas. Y no es para menos: aunque sólo sea para reivindicar el riesgo. Victoria Acebo y Ángel Alonso proyectaron una vivienda en una urbanización marcada por las construcciones pintorescas con aire de caserío.

El encargo llegó de dos matrimonios que habían seguido la obra de este estudio madrileño. Es decir que lo tenían claro: su vivienda no se iba a parecer en nada al resto. Nada más desplazarse a Urretxu, los arquitectos se encontraron con un solar casi imposible, sobre todo para quien ejerce su labor en la meseta.

Es una parcela en ladera, con lo que la casa tenía que elevarse 12 metros, por encima de su apoyo, para conseguir la cota que exigía la normativa municipal. 'Así que desde el principio estaba la idea de construcción ligera, con una estructura que diera la sensación de lo que iba a construirse: una casa en el aire', recuerda Victoria Acebo.

Esa sensación marca toda esta urbanización en hilera, situada sobre el centro de Urretxu, por encima de los tejados de las casas más próximas. Pero sólo las Casas M.U. (como fueron bautizadas a partir de los apellidos de sus propietarios) consiguen reflejar esa sensación de ingravidez. Como recuerdan ellos mismos: 'En esta ocasión, nuestro objetivo era la elevación'.

Además, los arquitectos querían registrar la vinculación con el paisaje industrial de toda Guipúzcoa, marcado por la siderurgia. De ahí que se optara por utilizar el forjado y el acero como presupuestos básicos en la construcción. Victoria Acebo recuerda la reacción de las empresas contratadas: 'Cuando se enteraban de que había que levantar una vivienda, nos decían que ellos sólo sabían hacer naves'.

Las casas M.U. son una caja compacta abierta en su interior con un gran patio que sustituye al clásico jardín de viviendas en hilera. En el exterior, optaron por el uso del vidrio como complemento del forjado, con el fin de que el volumen pareciera que flotaba en la luz, reflejándola. Esa combinación de materiales, inédita en el entorno, remata la singularidad del edificio.

Todo ello desde los presupuestos que caracterizan a este estudio cuando trabaja en el campo de la vivienda. 'Buscamos soluciones generales que permitan avanzar en la definición de mejores viviendas, más sencillas en su formalización y su construcción, pero más ricas en cuanto a las experiencias espaciales', comenta Ángel Alonso.

Es decir, que la mayor inversión que realiza una familia en su vida ofrezca un hábitat marcado por el soleamiento, la ventilación y la distribución abierta.

PERFIL

Con siete años de estudio, Acebo & Alonso se han situado en la vanguardia de la arquitectura española, gracias a su investigación en el campo de la vivienda y a los premios obtenidos en concursos públicos. En noviembre, comenzará las obras del Centro de Arte de A Coruña, uno de sus primeros premios, al que han seguido otros como el del Recinto Ferial de Palma de Mallorca.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_