El 61% de los alumnos aprueba la formación que reciben en sus institutos
Siete de cada 10 estudiantes se sienten capaces de estudiar lo que se propongan
Los alumnos de secundaria, que tienen entre 12 y 18 años, valoran la educación que reciben en los institutos. Así lo opina el 61% de los 4.620 estudiantes encuestados en centros públicos y privados. Un 25% manifiesta indiferencia cuando se le pregunta por la formación que le proporciona en el instituto y un 13% no cree que sea la adecuada. Este cuestionario sobre los Valores del alumnado de secundaria de la Comunidad de Madrid es un estudio elaborado por Álvaro Marchesi y Ricardo Lucena, del Instituto de Evaluación y Asesoramieto Educativo (Idea), con el patrocinio de la Fundación Hogar del Empleado. Las conclusiones que de él se desprenden son extrapolables a todos los chicos de secundaria de España.
Los alumnos de esta edad, que comprende toda la secundaria, tanto la obligatoria como el bachillerato o los ciclos formativos de FP, creen también que las posibilidades formativas que existen son suficientes: el 79,8% opina que hay múltiples opciones donde elegir, una cifra que se eleva al 82% cuando contestan los estudiantes de centros concertados y al 83,5% si son las chicas las interrogadas.
Los estudiantes se muestran optimistas también ante sus posibilidades académicas: casi siete de cada 10 se sienten capaces de abordar con éxito cualquier estudio que se propongan en el futuro. Ésa es la media, pero si se divide la muestra entre los que obtienen buenas, regulares y malas notas, los porcentajes resultan dispares. Entre los que obtienen buenas calificaciones, un 87% se ve capaz de afrontar los estudios que quiera, una cifra que cae al 48% entre los que sacan peores resultados.
Los alumnos se muestran aún más satisfechos con la educación en valores que reciben: como media, un 66,6% afirma que es buena y un 33% está en desacuerdo o se manifiesta indiferente ante esta consideración. Al pasar del primer al segundo ciclo de la ESO, el porcentaje cae del 77% al 65%.
La buena opinión que los estudiantes tienen de su centro de estudios coincide con la confianza que demuestran en la educación, la institución más valorada tras la familia. Sin embargo, el colegio es la cuarta institución entre las que ejercen influencia en la formación de sus valores. Por delante sitúan a la familia y a los amigos.
El futuro profesional le preocupa a un 73% de los alumnos, más en la medida en que aumenta su nivel de estudios y el mercado laboral se acerca. Sin embargo, la mitad de los chicos encuestados considera que cada vez son mayores las posibilidades profesionales que tienen los jóvenes.
Clases prácticas de solidaridad
En la encuesta destaca la gran 'liberalidad' que demuestran ante cuestiones personales o individuales, por ejemplo el sexo: el 81,5% opina que las relaciones sexuales deben ser libres siempre que las personas se quieran; y la mitad rechaza ventajas para las parejas heterosexuales por el hecho de serlo. Pero las cuestiones sociales no las tienen tan presentes. Frente a la inmigración, sólo un 8,5% considera que los extranjeros aportan riqueza al país que les recibe. El 54% piensan que 'es bueno que vengan pero con control'. Y un 37% perciben a los inmigrantes como un problema u opinan que 'no deben venir'. La emigración ocupa en su interés el último lugar de una lista de 11 temas sociales. Y en los últimos puestos aparecen también la violencia, el paro, el medioambiente y el racismo. A pesar de eso, un 66,6% dice que recibe una buena educación en valores en clase. Así pues, son individualistas y liberales en cierto sentido, pero la solidaridad ante problemas sociales de primer orden no parece ser su fuerte. Ni siquiera las ONG están en los primeros puestos de su interés. ¿Cómo debería abordarse la solución ante estas formas de pensar? Álvaro Marchesi propone 'realizar actividades voluntarias de servicio a la comunidad', iniciar vías de cooperación reales y 'que se tengan en cuenta en el currículo académico'. 'Esas experiencias con niños, ancianos o enfermos, obligaría también a los colegios a relacionarse con las instituciones democráticas', explica Marchesi.Cabría reflexionar sobre los valores que reciben los chicos en los colegios, a juicio de Marchesi. Y también los que perciben en la sociedad, la familia y los medios de comunicación.
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