_
_
_
_
Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Muertos imaginarios

La trayectoria de Miguel Ángel Campano (Madrid, 1948) lleva camino de convertirse en una de las más consistentes entre las de los pintores de su generación. A lo largo de ya más de treinta años de exposiciones, ha explorado la tradición de la vanguardia y la tradición en general, ha descrito giros, pegado saltos y propiciado regresos. Entretanto ha ido desarrollando una particular manera de hacer, dominada por la expresión inmediata y por una intensidad extrema en sus manchas y sus trazos, una manifestación de energía que siempre hace pensar, a la vista de cada una de sus obras, que allí, realmente, ha pasado algo.

En esta ocasión nos encontramos con un conjunto de lienzos (acompañados de aguafuertes) realizados con ocasión de una estancia en la India. Tratándose de un artista como Campano, un pintor perteneciente a esa clase de gentes que solían llamarse hombres (o mujeres) de espíritu, esa visita no podía sino dejarle una huella profunda.

MIGUEL ÁNGEL CAMPANO. SUDARIO

Galería Tomás March Aparisi y Guijarro, 7. Valencia Hasta el 4 de noviembre

Las pinturas que presenta son unas piezas uniformemente rectangulares cuyo soporte son unas telas (lungees) hindúes cuyos colores varían con las castas, y que se emplean no sólo como vestido para los vivos, sino como sudarios en los funerales. Campano se sirve de sus regulares tramas geométricas como fondo sobre el que articular sus propios entramados.

En cuanto que sudarios, lo inscrito en ellos cobra el carácter metafórico de impronta indicial, de rastro de una vida pretérita en forma de marca del cuerpo inane. Lo que Campano propone, unas veces en términos irónicamente geométricos y otras a través de gruesas y poderosas líneas enrevesadas y sinuosas, es una especie de interpretación póstuma de los residuos de unas vidas imaginarias. Algunas parecen haber sido dramáticas, tristes o fragmentarias. Otras más serenas. Pero todas merecen interés. Y todas caben, como las nuestras, dentro de los límites de un sencillo rectángulo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_