Elías, espoleado
El catalán fue la única opción de su equipo para restar puntos a Melandri
Ayer no quedaba más remedio. Toni Elías, de 19 años, se convirtió por su forma de pilotar, por su soltura y por la eficacia de su moto en la única opción del equipo Movistar Aprilia de restar puntos al italiano Melandri. Era la única forma de que Fonsi Nieto no viera reducidas de forma ya dramática sus opciones a un título mundial que está prácticamente imposible.Y por eso no sólo tuvo libertad de acción, sino que fue espoleado por todo el equipo hacia la victoria.
Elías se mantuvo a rueda de Fonsi mientras Melandri no comenzó a coger distancias. Pero, cuando todo el mundo pudo constatar, por los problemas que fuera, que el sobrino del campeonísimo Ángel no podía seguir el ritmo del líder del Mundial y de la carrera, el manresano pudo volar solo hasta donde su corazón y su capacidad le llevaran.
Eclipsado toda la temporada por la sombra de un Fonsi pletórico y relegado a un segundo plano en el seno del equipo, a Elías le costó afirmar su clase en el cuarto de litro. Llegó a la categoría con muchas dudas y tras acaloradas discusiones con su ex mentor Alberto Puig, que apostaba por su continuidad en los 125cc, en los que sus opciones al título habrían sido enormes. En vez de eso, decidió convertirse en la cola del león de un equipo que tenía un líder incuestionable.
Su adaptación a la categoría no fue fácil. Pero, a mitad del campeonato, Elías ya comenzaba a sentirse cómodo sobre una moto que le llevó a un segundo puesto (Holanda) y dos terceros (Gran Bretaña y la República Checa). Sin embargo, sus resultados parecieron quedar pendientes de las necesidades de Fonsi para afianzar su hipotético título mundial.
Pero ayer todas las estrategias de equipo convergieron para que Elías lograra el triunfo. Otra vez estaba ahí, detrás de Fonsi, resistiéndose a sobrepasar a su jefe de filas, perdiendo incluso su ritmo para mantenerse a rueda. Hasta que Melandri tiró fuerte. Entonces todo se desató. Desde el box lanzaron a Elías al ataque, a la búsqueda del hombre que está cerrando el paso a Fonsi. Y no falló.
Se acercó a Melandri, le superó varias veces con trazadas demasiado abiertas que permitieron al italiano recuperar el liderato. Pero en las últimas curvas lanzó su estocada final. Y ganó. Fue su primera victoria en los 250cc y la tercera de su carrera profesional, tras las dos logradas en 2001 en los 125cc.
Y fue un momento mágico porque acabó haciendo justicia a un piloto de una calidad incuestionable que, por una vez, recuperó las sensaciones de libertad de que había disfrutado en la pasada temporada. Su triunfo obligará a realizar un planteamiento de igualdad para la próxima campaña. Elías decidió hace unas semanas seguir en Aprilia. Y ahora ha demostrado que, espoleado por el equipo, él también puede ganar.
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