Los directores de instituto exigen recursos y autonomía

Más recursos, capacidad para determinar el personal que necesitan, más autonomía y un reparto equitativo de los alumnos con necesidades educativas especiales en los centros públicos y concertados. Así pueden resumirse las reivindicaciones de la Asociación de Directores de Instituto de Andalucía (Adian), que ha celebrado una asamblea en Córdoba.

'Los directores gestionamos el mantenimiento, todos los suministros y los gastos del centro: y se nos asignan recursos claramente insuficientes', señala José Antonio Ruiz, coordinador de Adian en Córdoba. 'Nos permiten mantener abierto el instituto, pagar la luz, el agua y el teléfono, a veces con dificultades. Es poco, pues, lo que podemos invertir en material didáctico, actividades y proyectos'. Reclaman que los presupuestos de los centros se incrementen en un 50% en cuatro años.

Otro punto importante es el del personal. 'Queremos que los centros, haciendo uso de su autonomía, como recoge la ley, puedan participar en la distribución del profesorado', indica Ruiz. 'Cada instituto tiene sus particularidades y diferentes necesidades de personal. Ahora, el cupo de profesores se calcula por criterios puramente numéricos. Los directores necesitamos más personal para atender a la diversidad, creemos que la calidad de la enseñanza debe venir por los recursos humanos'. Ruiz defiende que sean los centros los que emitan una propuesta adecuada a su realidad concreta.

En cuanto al personal de administración y servicios, también falta, y no siempre tiene la cualificación precisa. Según relata Ruiz, las bajas no se cubren o el sustituto tarda más de un mes en llegar. 'Cada vez hay más burocracia y más trabajo administrativo en los centros. Y casi todos tienen carencias de personal', añade.

También hay exigencias relacionadas con la escolarización. 'La red de centros públicos', sostiene Ruiz, 'no debe ser, como ocurre ya, subsidiaria de la privada; los alumnos con necesidades educativas especiales, en particular los que proceden de medios desfavorecidos, deben ser repartidos equitativamente entre todos los institutos que reciben fondos públicos. Los alumnos de barriadas marginales no van a integrarse en un medio que repite el de su escalera o el de sus pisos'.

Ruiz apoya la creación de 'aulas de inmersión lingüística' para inmigrantes de habla no hispana, que son cada vez más (en los últimos tres años se ha triplicado su número). Propone además que se mejore la comunicación con la Junta y también mejoras en la función directiva.