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GESTIÓN Y FORMACIÓN

La Red revoluciona la 'cultura de la casa'

El 72% de las empresas tiene portal del empleado y para más de la mitad es la vía principal de comunicación interna

Amaya Iríbar

Los trabajadores de dos multinacionales que anunciaron hace poco su fusión están siguiendo día a día el proceso a través de sus portales corporativos, las páginas web a las que sólo tienen acceso los empleados de la compañía. Es sólo un ejemplo del impacto que están teniendo las nuevas tecnologías en la comunicación interna de las empresas, 'una asignatura pendiente' para muchas compañías españolas, en palabras del presidente de la consultora Hay Group, Enrique de Mulder.

La extensión de los portales del empleado, intranet y soluciones similares ha sido espectacular. Hace dos años contaban con esta herramienta el 63% de las grandes empresas españolas y hoy están presentes en el 72%, según el III Estudio sobre la Comunicación Interna, elaborado por el Instituto de Empresa, Inforpress y la revista Capital Humano, y que se basa en una muestra de las 500 mayores compañías por facturación. Para el 55%, el portal se ha convertido en el principal canal de comunicación interna.

El 11% de las empresas asegura que los canales tradicionales para comunicarse con los empleados han desaparecido
Muchas empresas españolas 'han confundido informar con comunicar', asegura el presidente de una consultora

Los portales permiten ordenar la información que existe en la empresa y fortalecer los lazos de pertenencia, aseguran en Emplaza, la filial del Terra Lycos especializada en este negocio. Eso no quiere decir que los medios tradicionales, como las revistas internas o los tablones de anuncios, hayan desaparecido, aunque han sufrido el impacto de un medio que puede ser inmediato, interactivo y que da rapidez y abarata los costes. El 34% de las encuestadas reconoce que el uso de otros canales ha disminuido y un 11% asegura que incluso han desaparecido.

El principal reto es que los empleados utilicen el portal, algo que hacen sobre todo los mandos intermedios y el personal de oficinas, según el estudio. Uno de los fracasos habituales es ofrecer información poco interesante, aseguran varios consultores. El estudio constata que sólo el 38% de las empresas actualiza sus contenidos todos los días, si bien el porcentaje sube al 53% cuando se tienen en cuenta las que lo hacen 'dos o tres veces por semana'. El 6% sólo da este paso dos veces al año.

Además, la extensión de las nuevas herramientas no soluciona un problema de raíz. Muchas empresas españolas 'han confundido informar con comunicar', resume el directivo de Hay Group. Es decir, que se limitan a facilitar la comunicación descendente, de la dirección a los empleados, pero se suelen olvidar de favorecer la participación y, en ocasiones, de implicar a los jefes directos. Muchas son conscientes: el 71% de los consultados reconoce que las mejoras pasan por dar mayor participación a la plantilla y, en menor medida, fomentar el liderzgo y el compromiso de la alta dirección.

'Las nuevas tecnologías han supuesto un gran cambio, pero no sirven de nada si el concepto de la comunicación falla', explica Juan Manuel Cruz, de PricewaterhouseCoopers. Si la cultura de la casa es poco participativa, un portal no ayudará gran cosa. Para este consultor una buena política debe decidirla la alta dirección, que es quien establece el grado de participación que se quiere dar a la plantilla y los canales adecuados para cada cosa.

La comunicación interna es una preocupación reciente en España. Basta con echar un vistazo a los presupuestos: el 42% de las empresas gasta menos de 30.000 euros anuales, según el estudio. A pesar de ello, la mayoría de los consultados considera que la situación está cambiando. Las nuevas tecnologías haránesa comunicación interna cuando se produzca definitivamente ese cambio cultural.

¿Quién manda aquí?

Las empresas organizan su comuicación interna de acuerdo a tres modelos fundamentales, según se desprende del III Estudio de Comunicación Interna. Más de la mitad de las compañías tienen integrada esta función en el departamento de recursos humanos, el 16% en el de comunicación externa y sólo el 10% ha creado un departamento especifíco. Esta última opción no es la más adecuada, según algunos expertos, ya que puede alejar de este cometido al resto de directivos, sin cuya implicación es difícil que estas estrategias sean efectivas. La misma diversidad existe en cuanto a la dependencia organizativa del portal del empleado: en un 40% de los casos está en manos de recursos humanos, en un 25% depende de la dirección general y en un 23% de una dirección específica. La aprobación de lo que se incluye en el portal es una función del director de comunicación interna en el 42% de los casos, de su homólogo de recursos humanos en el 38% y del 24% de los directores generales. En el 13% de los casos esta función corresponde a áreas tecnológicas.

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Sobre la firma

Amaya Iríbar
Redactora jefa de Fin de Semana desde 2017. Antes estuvo al frente de la sección de Deportes y fue redactora de Sociedad y de Negocios. Está especializada en gimnasia y ha cubierto para EL PAÍS dos Juegos Olímpicos y varios europeos y mundiales de atletismo. Es licenciada en Ciencias Políticas y tiene el Máster de periodismo de EL PAÍS.

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