Barcelona propone a los propietarios de pisos vacíos que los cedan para alquiler

No hay viviendas de alquiler y las que hay son caras. Mientras tanto, hay un número difícil de establecer, pero en todo caso elevado, de pisos vacíos en toda la ciudad, especialmente en Ciutat Vella y el Eixample. Muchas de estas viviendas están desocupadas y fuera del mercado porque requieren una rehabilitación que resulta costosa. El Ayuntamiento de Barcelona quiere recuperar esos pisos para el mercado de alquiler mediante acuerdos con los propietarios. El Instituto Municipal de la Vivienda asumiría el coste de la rehabilitación y cubriría, mediante un seguro, posibles daños e impagos del alquiler.

El Ayuntamiento considera que la Administración central y la Generalitat deberían crear un fondo de ayudas a la rehabilitación de pisos e incluirlo en sus planes de viviendas, dijo ayer Eugeni Forradellas, concejal y presidente del Instituto Municipal de la Vivienda. Mientras tanto, este organismo va a emprender una iniciativa que ya han ensayado con éxito algunas entidades sociales, como Cáritas. A través de la Fundación Vivienda Social, Cáritas tiene un programa para sacar al mercado de alquiler pisos propios o cedidos. Se trata habitualmente de pisos vacíos que necesitan rehabilitación. La entidad los reforma y luego los alquila, con una garantía escrita para el propietario en la que se establece que al terminar el plazo de cesión -normalmente corto- podrá disponer libremente de la vivienda y que ésta le será devuelta en condiciones.

'A veces se trata de construir el baño, otras, de poner la cocina en condiciones o sustituir conducciones ya obsoletas de agua y luz. Son obras que habitualmente los propietarios no pueden afrontar, y por eso tienen el piso cerrado', explica Luis Miguel, portavoz de Cáritas, quien hace 'una llamada al sector inmobiliario para que colabore'. Cáritas invirtió el año pasado 210.000 euros en este programa, del que se beneficiaron 249 personas.

18.000 viviendas

El Ayuntamiento de Barcelona se propone ahora aplicar un plan parecido. El primer paso será ponerse en contacto con las entidades financieras y los administradores de fincas para localizar los pisos vacíos. El objetivo es ponerlos en el circuito de alquiler. 'Puede ser una buena fórmula para atender la demanda de colectivos sociales necesitados', precisó Forradellas. En la actualidad, el consistorio subvenciona el coste de alquileres en casos de precariedad. Pero el sistema que ahora se propone persigue sacar al mercado de alquiler viviendas que no lo están. Es difícil determinar el número de viviendas vacías en Barcelona. El último padrón municipal las situaba en unas 75.000. Sin embargo, un estudio municipal realizado el año pasado mantenía que, en realidad, los pisos realmente vacíos eran unos 18.000. Muchos pisos figuran como vacíos porque los residentes no están empadronados porque ya lo están en otro, según puso de manifiesto un estudio realizado sobre una muestra de 1.000 viviendas de la ciudad.

Forradellas insistió ayer en la necesidad de cambiar el enfoque de los actuales Planes de Vivienda, de manera que en el futuro estimulen el alquiler y no la propiedad. El 80% de las viviendas de Barcelona es de propiedad y sólo el 20% es de alquiler. Forradellas cree que los planes de vivienda deben incentivar la rehabilitación de pisos para alquilarlos 'con desgravaciones tanto para el propietario como para el arrendatario. España es el único país de Europa que no concede este tipo de ayudas'. Añadió que el consistorio ya hace un esfuerzo notable para poner viviendas de alquiler en el mercado, centradas por ahora en dos segmentos: primera vivienda para los jóvenes y apartamentos asistidos para la tercera edad. De los 7.000 pisos actualmente en ejecución promovidos directamente por el consistorio, el 40% son de alquiler y el resto de propiedad en régimen de protección oficial.

Como estrategia municipal para favorecer la rehabilitación, Forradellas explicó que el Ayuntamiento extenderá las oficinas de rehabilitación que ahora existen en Poble Sec, Gràcia, Eixample y Ciutat Vella a 'todos los barrios con núcleos antiguos' de la ciudad.