Un informe del Ayuntamiento de Almería acusa a la policía de pagar el viaje desde Ceuta a irregulares

La financiación del traslado de inmigrantes sin papeles de unas ciudades a otras se está convirtiendo en una práctica casi rutinaria. Un informe del Ayuntamiento de Almería sostiene que el 90% de los argelinos llegados a la ciudad en el último año portan expedientes de expulsión tramitados en Ceuta, desde donde son 'conducidos y orientados, tanto por la policía como las ONG a Almería'. Este trasiego ya fue denunciado en varias ocasiones por el consejero de Gobernación, Alfonso Perales,aunque ayer la Delegación del Gobierno en Ceuta negó que la policía pague el traslado.

Los propios argelinos explican a su llegada a Almería que la policía o el CETI le abonan el pasaje en barco desde Ceuta hasta Algeciras, y a veces el autobús hasta Málaga y Almería. El consejero de Gobernación, Alfonso Perales, ha criticado en varias ocasiones el traslado de inmigrantes de unas ciudades al considerar que sólo sirve para cambiar los problemas de un lugar a otro.

El informe del Ayuntamiento de Almería, elaborado en mayo por los técnicos del centro municipal de acogida que atiende a numerosos inmigrantes, señala que en el último año han observado la llegada de dos grupos a la semana de entre 6 y 12 argelinos 'con indicios de partir de forma organizada, no se sabe por quién'. La gran mayoría porta papeles de expulsión expedidos en Ceuta. 'Paradójicamente aparecen en territorio peninsular, en grupos y en determinadas zonas', agrega el estudio.

Por la documentación que poseen, los justificantes del viaje en barco entre Ceuta y Algeciras y las declaraciones de los inmigrantes, los autores del informe aprecian 'suficientes indicios' para asegurar que estos argelinos son 'conducidos y orientados tanto por la policía como las ONG a Almería como lugar definitivo o de tránsito'. El viaje en barco desde Ceuta hasta Algeciras, recoge el informe, 'es abonado, según sus propias manifestaciones, por el CITE o por la policía'. El siguiente paso -el autobús entre Algeciras, Málaga y Almería- 'es abonado por la policía o las propias ONG'.

La llegada de estos grupos no va aparejada de un dispositivo especial de asistencia, lo que está provocando 'la saturación y colapso' del centro de acogida de Almería. En el informe se alerta además sobre otro efecto aún más grave desde el punto de vista social al 'derivar la demanda de papeles de una ciudad a otra que ya cuenta con una alta tasa de concentración de inmigrantes sin tener en cuenta planes de integración'.

Entre enero y mayo, el centro de acogida de Almería atendió a 1.055 extranjeros. La nacionalidad mayoritaria de los atendidos era argelina (350 usuarios), seguida de la marroquí (187) y rumana (118). Durante el año 2001 pasaron por el centro unas 2.000 personas. El informe destaca que los argelinos se han multiplicado por 4,5 respecto a 2000.

Sin embargo, la Delegación del Gobierno en Ceuta rechazó ayer las acusaciones contenidas en el informe de Almería. 'Ni la policía tiene presupuesto para pagar billetes a los inmigrantes ni en Ceuta hay más ONGs que la Cruz Roja', comenta un portavoz, que precisa que 'una vez que tienen el expediente de expulsión, los extranjeros pueden moverse por el territorio español dentro de los plazos previstos'. 'El hecho de que los argelinos vayan a Almería se explica más bien porque ya hay allí un contingente importante con el que tienen contacto los que llegan y porque las mafias les alientan con anuncios falsos de procesos de regularización', agrega.

Los argelinos representan en este momento el mayor colectivo de extranjeros que pululan por Ceuta en espera de obtener un visado que les permita pasar a la península. En el Centro de Estancia Temporal para Inmigrantes hay actualmente 140, y más de un centenar pernocta en la calle en espera de plaza y acude a almorzar a diario al comedor de la Cruz Blanca, de los hermanos franciscanos. Una vez que acceden al centro el tiempo medio de estancia es de tres a cuatro meses. 'Una vez tramitada la documentación, se les concede el asilo o se les comunica el expediente de expulsión. En ambos casos, eso les permite abandonar el CETI y moverse por el territorio español hasta que se agote el plazo, en el caso de que su destino sea la expulsión', explica el portavoz de la Delegación