Sigue la búsqueda de los cuatro pescadores muertos en el naufragio

Las labores de búsqueda de los cuatro marineros desaparecidos en el naufragio del barco francés Cistude no han dado resultado, por lo que los rastreos continuarán hoy en alta mar para rescatar a los pescadores de Ondarroa Manuel Vázquez y Joseba Solabarrieta, el portugués residente en Pasaia José Baptista Da Silva y el francés Pascal Vassel. Los tres únicos supervivientes fueron el capitán del pesquero, el francés Jean-Yves Barbeau, su compatriota Tierry Moulic y Manuel Neves, vecino de Pasaia.

Entretanto, el Gobierno francés anunció ayer que pondrá todo de su parte para que 'se haga justicia' en el naufragio del Cistude, según confirmó el secretario de Estado de Transportes y de la Mar, Dominique Bessereau. 'Tenemos todos los elementos y la investigación continuará', aseguró. Bussereau añadió que no existe ningún riesgo de que ésta se interrumpa, pues el armador del buque noruego Bow Eagle, que abordó y hundió el pesquero, ha reconocido su implicación en el naufragio.

Por otro lado, el mercante noruego llegó ayer por la mañana frente al puerto holandés de Rotterdam, que era su destino final, tras ser inspeccionado en Dunkerque (al norte de Francia) por orden del primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin. Las autoridades judiciales francesas abrieron el martes pasado una investigación por homicidio involuntario, heridas involuntarias, fuga y no asistencia a personas en peligro, tras el naufragio del pesquero. Según la versión del armador noruego, dos miembros de la tripulación del carguero, compuesta por filipinos, salvo el patrón, se apercibieron del accidente, pero no dijeron nada hasta dos días después.