De los bares de copas

Asociaciones de vecinos del centro de la ciudad, concretamente las de Malasaña (Centro) y la asociación El Organillo (Chamberí), han dirigido una denuncia al alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, en la que culpan al Consistorio de pasividad municipal ante el incumplimiento de la normativa de la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas y las ordenanzas municipales que la regulan. En particular, las disposiciones del decreto que aprobó el catálogo que establecía un periodo de un máximo de tres años para la adaptación de la actividad real que desarrollen los locales con la que establezca la licencia que les ampare.

Este plazo, que ha transcurrido en exceso sin haberse dado cumplimiento a las normativas, ha creado, por una parte, una clara indefensión a los ciudadanos, que continúan viendo y sufriendo los ruidos y molestias de buena parte de los locales, especialmente aquellos vecinos que viven próximos a locales con actividad musical o en zonas de concentración de dichos establecimientos; y por otra, impide evaluar la efectividad de unas normativas aprobadas hace más de tres años con el consenso de todos los sectores implicados en la problemática del ocio nocturno y el descanso.

Esta denuncia, que insta al Ayuntamiento a que en el plazo de tres meses dé cumplimiento a la normativa vigente, es un paso previo -en caso de no ser atendida por el Ayuntamiento- a la solicitud, por parte de las asociaciones de vecinos denunciantes, de dicho cumplimiento ante la Administración de Justicia, constituyendo una iniciativa sin precedentes en nuestra ciudad.