La policía busca en Alemania a un padre por matar a dos hijos

El fantasma de los malos tratos, hasta llegar al asesinato, contra aquellos que no pueden defenderse vuelve a andar suelto por Alemania. El miércoles, un barco halló en el Rin los cuerpos de dos hermanos de cinco y cuatro años. La policía busca al padre como supuesto autor del doble crimen. En Alemania, más de 100 niños mueren cada año asesinados (incluidos los abandonados al nacer). En un 70% de los casos mueren a manos de uno o ambos padres.

El horrible hallazgo de los dos pequeños se convirtió en macabro cuando se descubrió que ambos estaban atados por la cintura con una correa. Las sospechas recaen en el padre, de 43 años y separado. El hombre no aparece por su domicilio, en Offenbach, desde el pasado fin de semana. En el registro de la vivienda se halló una carta en la que asegura que la muerte de sus hijos es un accidente. La policía afirmó ayer que los hermanos habían sido arrojados muertos al agua. Al no presentar signos exteriores de violencia, no se descarta que fueran envenenados.

Otro crimen terrible ocurrió el pasado invierno en Berlín: una mujer dejó a su bebé de dos años abandonado y solo en la casa y se trasladó a vivir a la vivienda de su nuevo novio. El niño fue encontrado muerto de hambre y sed a los dos meses. Nadie escuchó su llanto.