La Ertzaintza atribuyen a un ajuste de cuentas el crimen de Trapagarán

La Ertzaintza atribuye a un ajuste de cuentas entre delincuentes el apuñalamiento mortal de un hombre, de 33 años, cuya identidad no se ha dado a conocer, cuyo cuerpo fue encontrado hacia las 21.30 del martes en el barrio Juncal de Trapagarán.

La víctima tenía antecedentes policiales por robo y narcotráfico, por lo que las primeras pesquisas apuntan en esa dirección, según señaló ayer un portavoz de la policía vasca. La Ertzaintza rehusó dar más detalles sobre el crimen para no interferir las investigaciones. El Juzgado de Instrucción de Barakaldo encargado del caso ha decretado el secreto del sumario.

El crimen se produjo en las inmediaciones de un concesionario de vehículos, sito en la carretera BI-3746 que conduce de Trapagarán a Barakaldo, en las afueras de la localidad vizcaína. La víctima quedó tendida en el suelo en medio de un charco de sangre. Junto a él se encontraba un coche Golf, de color rojo, matriculado en Bilbao, aparcado en batería, con las luces encendidas y la puerta abierta.

El cadáver fue trasladado al Instituto Anatómico Forense donde estaba previsto que ayer se le practicase la autopsia. La Ertzaintza trata de aclarar las causas del suceso y determinar si el autor del crimen fueron uno o más individuos.

Vecinos de Trapagarán desconocían ayer los pormenores del suceso; algunos incluso no sa habían enterado de lo ocurrido. En las calles y en las tiendas nadie comentaba el suceso. 'Al no ser un vecino del pueblo es difícil saber lo qué ha pasado. Esto tiene toda la pinta de ser algo que han solucionado a su manera unos delincuentes', coincidieron varios.