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Un matrimonio de jubilados, hallado muerto a cuchilladas dentro de su casa en Catarroja

La Guardia Civil cree que sorprendieron a unos ladrones, aunque no descarta otras hipótesis

Una mujer de 61 años, Mercedes González, y su marido, Demetrio Torrejón, de 69, murieron degollados y acuchillados poco después de la medianoche del martes en el recibidor de su casa, en la localidad de Catarroja, municipio del área metropolitana de Valencia. Minutos antes, los asesinados despidieron a un matrimonio vecino con el que cada noche salían a pasear. Un vecino alertó a Emergencias al escuchar gritos de auxilio y golpes. La Guardia Civil trabaja con la hipótesis de que sorprendieran a uno o a varios ladrones en su casa, aunque no descarta otras posibilidades.

Un vecino alertó al 112, a las doce y diez de la noche, de que había oído golpes y gritos de auxilio en un piso de su edificio, en el número 6 de la plaza del Maestro Itubri, en Catarroja, localidad de más de 20.000 habitantes situada a nueve kilómetros de Valencia. Guardia Civil, Policía Local y SAMU se personaron en el lugar. Tras la puerta de acceso al piso encontraron los dos cuerpos degollados, con cuchilladas en el cuerpo y golpes en la cabeza. En el rellano había huellas con sangre de pisadas de una talla de zapato bastante grande. Unas cintas de persianas, a modo de cuerdas, pendían desde un palo situado en la terraza hasta la ventana de acceso al tendedero del piso de la pareja, en el patio interior.

Los indicios apuntaron desde el principio a que los dos fallecidos habían sorprendido a uno o varios ladrones en el interior de su casa y que habían sido asesinados por ellos. Los asesinos se habrían dado a la fuga por la escalera. Una vecina del edificio colindante aseguró que había visto antes del crimen a alguien saltando por la terraza. Otro vecino, desde un bar próximo, vio salir a un hombre corriendo del portal.

El alcalde de Catarroja, Antonio Chirivella, y fuentes de la Guardia Civil apuntaron, sin embargo, pasado el mediodía, que dudaban de que el robo fuera el móvil del asesinato porque nada estaba forzado ni revuelto. La investigación no descarta ninguna hipótesis, incluida la de que les esperaran para matarlos.

Mercedes González y Demetrio Torrejón ocuparon el piso en el que fueron asesinados en julio del pasado año, cuando se entregaron las llaves de la nueva construcción. Eran gallegos, vivieron más de 20 años en Alemania y regresaron a España hace dos. Tenían tres hijos: dos mujeres y un hombre. Una vive en Catarroja. Los otros dos residen en Alemania, y uno de ellos tenía previsto llegar a Valencia para pasar las vacaciones el próximo domingo. Los restos de la pareja, después de que la juez procediera pasadas las cuatro de la madrugada a su levantamiento, fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense de Valencia. Tras la autopsia serán trasladados a Galicia para ser enterrados.

Ángel, vecino de la misma planta, relató: 'Salimos juntos a pasear a las diez y media de la noche. Volvimos hacia las doce menos cinco y nos despedimos en el ascensor. No pasaron ni veinte minutos cuando nos avisó un vecino. Salimos al rellano y estaban la policía, la Guardia Civil y sangre por todas partes'.

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La zona en la que ocurrieron los hechos es una de las más afectadas por la inseguridad ciudadana en Catarroja. Hace pocos días los vecinos iniciaron una recogida de firmas para pedir presencia policial. El fin de semana pasado hubo cinco robos en domicilios. El hecho se enmarca en la escalada de delincuencia que registra la Comunidad Valenciana, con 24.062 delitos en el primer trimestre de 2002 en Valencia, lo que supone una media de 4.000 más que el año anterior en el mismo periodo, un incremento de más del 20%, según datos del Ministerio de Interior.

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