Una avería deja a España sin sus 14 Phantom de reconocimiento

La Fuerza Aérea española está haciendo vuelos de reconocimiento para tomar imágenes del islote Perejil y de las zonas próximas a las guarniciones norteafricanas con aviones Cesna C-550 Citation V del Centro Cartográfico y Fotográfico del Ejército del Aire, con base en Cuatro Vientos (Getafe). Se trata de aviones sin autodefensas cuya misión es obtener material para levantar los mapas de España, pero que no están preparados para operar en un entorno hipotéticamente hostil.

Esta función deberían cumplirla los cazas de reconocimiento táctico del 123 Escuadrón, con base en Torrejón (Madrid). El problema radica en que sus 14 aviones Phantom, equipados con camaras ópticas e infrarrojas y con misiles Sidewinder, han tenido que ser dados de baja prematuramente.

Un problema en el sistema hidraúlico ha dejado fuera de servicio estos 14 aviones, adquiridos a partir de 1989 a la Guardia Nacional de EE UU. El alto coste de la reparación disuadió de realizarla, teniendo en cuenta que hay en marcha un programa para equipar a los cazas F-18 con equipos de reconocimiento (pods) capaces de sustituirlos.

Pero, como la mayoría de los programas del Ministerio de Defensa, ha sufrido demoras y los F-18 no estarán listos para actuar como cazas de reconocimiento hasta principios del año que viene. La crisis se ha desatado en el momento menos oportuno.