La bajada de la gasolina y el inicio de las rebajas estabilizan los precios en junio

La inflación ha dado tregua en junio. Después de varios meses de escalada, los precios se han mantenido estables respecto a mayo y la inflación anual se ha recortado dos décimas, hasta el 3,4%, cuando el objetivo anual es del 2%. El inicio de las rebajas y el descenso de las gasolinas han compensado alzas en alimentación, turismo y hostelería. El INE y el sector del turismo, responsable de un 22% de la inflación en lo que va de año, buscan fórmulas para reflejar en el índice las ofertas de última hora que se producen en julio. La señal negativa es que la inflación subyacente (sin energía ni alimentos frescos) se mantuvo en el 4,1%.

Los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) suponen un respiro para la inflación aunque, probablemente, será pasajero. Los precios no variaron en junio respecto de mayo, acumulan una subida del 2,5% en los seis primeros meses y, lo más importante, recortaron dos décimas su tasa anual, hasta el 3,4%. Es el primer mes en lo que va de año en que se consigue arañar alguna décima en la lucha contra la inflación, aunque ya no parece posible cerrar 2002 por debajo del 3%. La buena marcha de la segunda mitad del año pasado (los precios cayeron del 4,2% en junio al 2,7% en diciembre), hará difícil la mejora.

El inicio de las rebajas de verano y la reducción de los precios de las gasolinas explican la mayor parte de ese buen dato de inflación. Los carburantes han restado una décima al índice general, al descender un 3,2% respecto de mayo (un 5,7% en los últimos 12 meses), el primer recorte en lo que va de año. Otra media décima obedece a las prendas de vestir, con un descenso del 0,6% en relación a mayo (aumento del 5,9% en un año).

En el caso de los carburantes, el origen está en el recorte de los precios del petróleo y la apreciación del euro frente al dólar. En lo que queda de año, sin embargo, no cabe esperar mayores avances. Habrá un efecto salto o estadístico, ya que en la segunda mitad del pasado año los precios de los carburantes cayeron en picado; es decir, los descensos de precios deben ser muy importantes en los próximos meses para que, por comparación, se consiga reducir más la tasa anual.

Salvo rebajas, gasolinas y algunos alimentos (patatas, pollo, huevos y hortalizas), el resto de los precios siguen al alza. En especial, el turismo y la hostelería, por el inicio de la temporada turística y el redondeo del euro. En un mes, los viajes organizados han subido un 2,7% y los hoteles, el 2,8%. El INE y el sector trabajan para reflejar mejor las ofertas de última hora que se producen en julio.

Si al euro se le añade la subida de impuestos -con un impacto de medio punto en el 2,5% acumulado en el año-, se explica que la inflación del sector servicios se encuentre en el 4,8% respecto de hace un año, igual que en mayo. Es la mayor tasa desde marzo de 1996. Tampoco ha variado la inflación subyacente (sin alimentos frescos ni energía), que se encuentra en el 4,1%, la tasa más alta en seis años.

Tampoco se espera variación en el diferencial de precios con la zona euro. En mayo se disparó hasta situarse en máximo histórico de 1,7 puntos y el Ministerio de Economía estima que se mantendrá en junio.