Victoria Abril define '101 Réikiavik' como un homenaje a la tolerancia
La actriz estrena en España la película que rodó en Islandia en 1998
Todo empezó hace cuatro años en el Festival de Berlín. Victoria Abril se encontró con unos jóvenes productores islandeses que le recordaron que un año antes le habían enviado un guión. La historia, que la actriz descartó en principio por miedo al frío islandés, era 101 Réikiavik. Basada en la novela homónima del islandés Hallgrímur Helgason, relata la vida de un joven de 30 años que no quiere trabajar y cuya vida da un vuelco inesperado. Abril definió ayer la película, que se estrena mañana, como un homenaje a la tolerancia y a la vida.
Victoria Abril definió su participación en la película islandesa como 'una historia muy bonita'. En la conferencia de prensa en el cine Palafox de Madrid, la actriz contó que rechazó en principio el guión aterrorizada por la idea de rodar en Islandia, a una media de 15 grados bajo cero. La película se rodó pero su director, Baltasar Kormákur, optó, en una decisión que la actriz calificó de 'arriegadísima', por dejar sin filmar todas las escenas del personaje pensado para Abril, Lola, una profesora de flamenco, española y lesbiana, que vive y trabaja en Réikiavik.
Cuando, en 1998, la actriz se encontró en Berlín con el joven equipo de realización de la película, la insistencia de éstos, una relectura del guión y el ofrecimiento de adaptarse a la agenda y a las condiciones que ella quisiera imponer le hicieron cambiar de opinión.
Abril describió el guión, adaptado de la novela del autor islandés Hallgrímur Helgason (que RBA publica esta semana en España,) como 'una comedia de humor negro que recuerda a las de Berlanga, algo que hace mucho tiempo que yo no me encontraba'.
La historia narra la vida de un joven de 30 años que se niega a trabajar, sobrevive del dinero que el Estado islandés entrega a los parados, y se enamora locamente de la exótica Victoria Abril. La fatalidad es que Lola es, al mismo tiempo, la amante de su madre.
Seducida por Islandia
Victoria Abril pasó cuatro semanas del verano de 1998 en Islandia rodando su papel. Su experiencia allí la marcó profundamente, y de hecho ayer dedicó una gran parte de la conferencia de prensa a describir el país, sus paisajes, su gente y su cultura. La actriz demostró estar sumamente informada, a pesar de lo breve que fue su estancia allí. 'Islandia no produce nada, todo lo compran fuera de su fronteras, pues es un país cubierto de hielo. Pero al mismo tiempo es muy cálido por su origen volcánico, lo que posibilita que toda la electricidad se obtenga gratuitamente. Allí no te mueres de frío ni de hambre. El Estado te protege y cuida. Te paga por respirar. Es el primer país que vive en el siglo XXI, en una verdadera democracia'.
El carácter abierto y progresista de la sociedad islandesa se refleja en la película, que es vista por Abril como una 'apología de la tolerancia y la vida'. El protagonista abandona su actitud nihilista a medida que crece su relación con el personaje de Abril.
101 Réikiavik ha sido premiada en diversos festivales de cine, entre ellos los de Toronto, Locarno y Tesalónica. Los jurados han destacado especialmnete la labor de su director, Baltasar Kormákur que, después de desarrollar en los países nórdicos una brillante carrera como actor, se estrena ahora como director.
A pesar de los premios, la película ha tardado en llegar a España debido a problemas de distribución. Según Victoria Abril, los años transcurridos han permitido que se estrene en un momento en que el público español 'se encuentra verdaderamente preparado para verla y valorarla'.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.