Sagunto se libra de 10.000 camiones diarios
Fomento abre el enlace de la A-7 que convierte la autopista en una circunvalación
La inauguración ayer del nuevo enlace de la carretera N-340 con la A-7, junto al traslado del peaje de Puçol nueve kilómetros más al norte y la construcción de un tercer carril en ambos sentidos de la autopista van a liberar a Sagunto, en cuanto los usuarios se acostumbren a los cambios, del paso de 10.000 camiones diarios por su casco urbano. Tras más de una década pidiendo una circunvalación o la liberalización del peaje, por fin se logra una alternativa gratuita para el tráfico de la zona. En ese tiempo, se prorrogó 13 años la concesión de la autopista a Aumar.
Para que la obra sea completa sólo falta que se ejecute también, al oeste de la ciudad, un nuevo enlace de la A-7 con la autopista Sagunto-Somport (conocida como N-234), por lo que seguramente todavía habrá camiones que crucen durante un tiempo el casco urbano de Sagunto en sus circulaciones entre la N-234 y la N-340.
El consejero de Obras Públicas, José Ramón García Antón, y el director general de Carreteras del Ministerio de Fomento, Antonio Alonso, inauguraron ayer el nuevo enlace de la A-7, el traslado del peaje y el tercer carril entre los kilómetros 471 y 480. Con una inversion de 20,7 millones de euros (3.450 millones de pesetas), esta obra supone en la práctica la circunvalación que Sagunto lleva pidiendo desde los años ochenta. Ya en abril 1992 la dirección general de Carreteras inició un estudio informativo sobre la variante, que no fue aprobado provisionalmente hasta octubre de 1995 (dos años más tarde sería definitiva). Para ponerlo en práctica hubo que negociar con la concesionaria de la autopista, la firma Aumar, el uso de un tramo de unos 13 kilómetros, de los que nueve eran de peaje.
Ampliación de la concesión
En esos años, causó un gran malestar en Sagunto que el Gobierno, a cambio de una rebaja de los peajes (el 30% de media), aumentara la concesión a Aumar en 13 años (del 2006 al 2019) cuando ya faltaba poco para su extinción. Es más, cuando en 1999 el Gobierno acordó aplicar una rebaja de los peajes (del 7%) permitiendo a las concesionarias que lo implantaran de forma selectiva, Aumar elegió mantener los precios en unas zonas, rebajar entre el 15% y el 30% según el número de viajes en otras y eliminar el peaje entre Puçol y el norte de Sagunto. En septiembre pasado, el Gobierno acordó pagar a la firma concesionaria 26,85 millones de euros (4.468 millones de pesetas) 'para restablecer el equilibrio económico de la concesión'. La obra se ha finalizado un mes antes de lo previsto porque el plazo de entrega se sitúo en 5 de agosto de 2002.
Según el último mapa de aforos en las carreteras valencianas elaborado en 1998 po la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes por la N-340 a su paso por el casco urbano de Sagunto pasaban 22.000 vehículos diarios, un tráfico considerable si se tiene en cuenta que por la A-7 circulaban 58.369 vehículos. Con el agravante, tal y como han denunciado constantemente durante la última década los miembros de A-7 sense peatje, de que la mitad de los que cruzan por la travesía de Sagunto son vehículos pesados. Más de 10.000 camiones han dejado sus ruidos, humos y atascos en medio de una ciudad que prácticamente ha quedado dividida en dos por una vía de alta capacidad.
Pese a la inauguración, el operativo previsto por el Ministerio del Interior para la operación 1 de julio, fecha de inicio de las vacaciones de muchos españoles, incluye entre los tramos más conflictivos para el tráfico la N-340 en la travesía de Sagunto, sólo por detrás de la A-3 entre Chiva y Valencia, el final de la N-234 a la altura de Segorbe, la N-332 en las travesías de Sueca, Gandia, Bellreguart y Oliva, y en las poblaciones de Altea, la Vila Joiosa, El Campello y Torrevieja.
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