Autoservicio
La Unión Europea, después de tantos años, todavía lucha por conciliar los intereses nacionales con el bien común. Los electorados han dado recientemente fuertes golpes a los políticos, haciendo poco sorprendente que los dirigentes se hayan estado guardando las espaldas durante este fin de semana en Sevilla. Los seis meses próximos tendrán retos mayores y la necesidad de tener altura de miras será urgente. (...) La cumbre de Sevilla se desarrolló carente de ambición y produjo un resultado poco alentador, siendo dominada por el temor a los votantes que tenían en casa. Así, Jacques Chirac, fortalecido recientemente, ganó nuevo margen para controlar su déficit presupuestario, suavizó los planes hispano-británicos para incrementar la dureza con terceros países con los que se tienen problemas con la inmigración y rechazó las propuestas alemanas y británicas sobre la existencia de votaciones por mayoría en futuras cumbres. (...) Ciertamente, la cumbre dio ímpetu a la búsqueda de una política común de asilo e inmigración. (...) Los líderes europeos están haciendo sus mejores esfuerzos para levantar muros contra los inmigrantes en vez de intentar persuadir a la gente en sus países de la necesidad de tener una estrategia más racional en cuanto a la inmigración. (...)
Países como Francia, Reino Unido y España quieren que sea el Consejo, mejor que la Comisión, quien conduzca y lidere la Unión Europea mientras rediseña su futuro. Si quieren justificar tal cosa, los líderes europeos deben demostrar que son capaces de mirar más allá de sus propios intereses.
Londres, 24 de junio
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.