Chamizo advierte de que no habrá soluciones para todos los inmigrantes encerrados en la universidad

El defensor del pueblo andaluz, José Chamizo, se presentó ayer en el encierro de inmigrantes en el campus de la Universidad Pablo de Olavide cargado de sinceridad. Y las noticias no eran buenas. Chamizo advirtió a los 17 representantes de los inmigrantes de que no habría papeles para todos, y eso si todo va bien. Además, criticó el encierro, del que aseguró que era 'una estrategia equivocada'. 'Los encierros no son una alternativa para reivindicar. Es muy difícil encerrar a inmigrantes sin una expectativa y en un contexto social y político que cada día es menos generoso'.

La cara de Chamizo decía más que sus palabras. El defensor del pueblo andaluz ha sido siempre bastante pesimista sobre el resultado que tendrá el encierro para los más de 400 inmigrantes que lo protagonizan. Ayer, se reunió en el edificio del rectorado de la Universidad Pablo de Olavide con los 17 representantes elegidos por los encerrados, aunque eludió visitar el pabellón polideportivo en el que se concentran la mayoría de los protagonistas de la protesta.

En el encuentro, que duró algo más de una hora, el defensor del pueblo andaluz dejó claro que no habría una solución global, incluso insinuó que para la mayoría este acto reivindicativo y de protesta no tendría un final feliz.

Chamizo, que subrayó con insistencia que su única pretensión es la de mediar entre las partes, aseguró que lo máximo a lo que se puede aspirar es a llegar a un 'punto medio' entre la quimera de la regularización de todos los encerrados y el drama de la expulsión también de todos.

A la salida de la reunión, el defensor del pueblo andaluz realizó un somero análisis de la situación y aseguró que los encerrados se pueden dividir en tres grupos: los que tienen la documentación en regla, los que tienen expedientes de regularización abiertos y, por último, la mayoría que está en la más absoluta ilegalidad. En relación con los primeros, Chamizo dijo que lo mejor sería 'que fueran a buscar trabajo'. En la misma línea se pronunció sobre aquellos con expedientes en marcha. Sobre los que no tienen ningún tipo de documentación, el defensor del pueblo andaluz fue rotundamente sincero y aseguró que 'no hay respuesta'.

Diálogo inexistente

Chamizo tampoco oculta que el diálogo con el Gobierno es prácticamente inexistente. El defensor del pueblo andaluz ve con preocupación la postura de fuerza adoptada por el Ejecutivo central sobre el encierro y la negativa a otorgar ningún tipo de concesión a las peticiones de este colectivo de inmigrantes.

A esta preocupación se une su propia repulsa al uso del encierro como método de reivindicación. Chamizo alerta asimismo sobre el riesgo de 'encerrar a unos inmigrantes sin una expectativa'. Aunque sin nombrarlos en ningún momento, el defensor del pueblo andaluz muestra con estas palabras su disgusto con los impulsores de este acto, ya que, a su juicio, las posibilidades de que los inmigrantes obtengan algún beneficio son escasas o prácticamente nulas.