El Consell ignora su norma y admite la Filología Catalana en las oposiciones

El Consell ha ignorado su propia negativa a convalidar la titulación de Filología Catalana -la única reconocida a nivel estatal desde 1995- en las oposiciones del 19 de junio para acceder al cuerpo docente de la Administración valenciana. El director general de Personal, José Antonio Rovira, confirmó ayer a los sindicatos que todos los aspirantes que han presentado este título han sido excluidos de realizar la prueba previa de valenciano, que se exigirá por primera vez. Eso contradice el decreto de requisito lingüístico, que sólo reconoce la licenciatura de Filología Valenciana.

En una conferencia de prensa celebrada en el Palau de la Generalitat junto a la consejera portavoz Alicia de Miguel el pasado 25 de abril, el máximo responsable de Educación, Manuel Tarancón anunció que quedaba excluida la titulación y aseguraba que los licenciados en Filología Catalana deberían presentarse a la prueba previa de valenciano, como requisito necesario para poder participar en el concurso oposición de 1.674 plazas docentes, que comienza el próximo día 19.

Las sorpresivas declaraciones de Tarancón -que fueron tildadas por oposición y sindicatos de 'frenazo al Pacte pel Valencià'- se producían minutos después de que el Consell aprobara un decreto descafeinado, que modificaba la redacción inicial pactada en la Mesa Sectorial de Educación. En el primer texto, el Gobierno de Zaplana reconocía la Filología Valenciana y sus 'equivalencias' que aluden a la Filologia Catalana. También se comprometía a exigir el conocimiento de la lengua como 'requisito previo' no sólo para acceder al cuerpo docente de la Administración valenciana, sino también para cualquier funcionario que quisiera ejercer la enseñanza (vía concurso de traslados o comisión de servicios) u obtener destino en esta Comunidad.

Tarancón afirmó ese día que sólo la vieja 'licenciatura de Filología Valenciana cumple con el requisito lingüístico', lo que provocó hilaridad en las Universidades; y alzó en pie de guerra al Institut Interuniversitari de Filología, a las propias universidades y a los sindicatos STEPV, CC OO y UGT que anunciaron que recurrirían la orden por un 'delito de prevaricación'. Es decir, por 'incumplir la legalidad vigente' contemplada en el Real Decreto 1435/1995 del Ministerio, que unificó las antiguas denominaciones de 'Llengua valenciana', 'Llengua i cultura valencianes' y 'Lingüística Valenciana' bajo 'el único título universitario de Filologia Catalana'. La polémica llegó incluso a la Acadèmia Valenciana de la Llengua.

El STEPV valoró ayer positivamente esta decisión y aseguró que las declaraciones de Tarancón 'sólo pretendían reabrir una polémica artifical con pretensiones electorales', y alertó contra la estrategia 'recurrente' del PP que 'perjudica la normalización del valenciano'. El jefe de Personal de Educación confirmó ayer que de 14.600 personas matriculadas en el concurso oposición, sólo 1.200 no han acreditado el conocimiento del valenciano y tendrán que realizar un examen previo.