Alivio y condena
Coche bomba en la Universidad de Navarra, la del Opus. Me acuerdo de personas concretas, con su nombre y su mirada. Lo siento por ellos. No hay víctimas mortales; algunos heridos y cuantiosos daños materiales. El aviso ha llegado a tiempo y ha sido preciso. Algo es algo. No desprecio la diferencia, pero sigue siendo pura estrategia, o simple fortuna. Pan para hoy y hambre para mañana.
Vuelve la mínima tranquilidad y, con ella, la desazón de fondo, la desilusión, e hastío. Otra vez lo mismo, ¿hasta cuándo nos mereceremos esto? ¡Qué digo merecer! ¿Hasta cuándo nos obligarán a soportar su peculiar dictadura? ¿Quién podrá sentirse libre si nunca ha hecho la prueba de decirles 'no'?-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.