'Tengo la mejor calva de Cataluña'

Con 50 años y tres hijas, aborda el próximo fin de semana el congreso de Uniò, cuya ejecutiva preside. Tiene buen encaje o hace de la necesidad virtud al hablar de Artur Mas como sucesor de Pujol. Se considera 'un político vocacional'. Colecciona plumas estilográficas y corbatas. Y le gustan el mar, la montaña, el esquí, el cine y la lectura.

Pregunta. Dicen que, en su partido, maneja el trabuco mejor que Curro Jiménez.

Respuesta. En absoluto. Más bien pienso que he sido débil con el adversario, porque enemigos no tengo.

P. Algo habrá cuando su círculo más cercano se ha ido entero al sector crítico.

R. Se pasaron el secretario general adjunto y el portavoz del partido. Pero no creo que fuera porque les negara el pan y la sal, sino todo lo contrario.

P. ¿Le viene bien que se aireen las travesuras de los hijos de Pujol para tapar el caso Pallerols?

R. En absoluto. Tengo confianza en la decisión de la justicia en el caso Pallerols. Y defiendo el derecho de los hijos de Pujol a tener actividades, que no están favorecidas por la Generalitat.

P. ¿Se le ha pasado ya el globo de no ser elegido delfín del president?

R. Nunca he tenido globo.

P. Sólo se fue del Gobierno catalán.

R. Me fui porque la designación de Mas quebraba el equilibrio de fuerzas. A partir de ahí hubo un proceso que desembocó en la actual federación.

P. En el 2003 irá de número dos, detrás de Mas. Y es vicepresidente de la Internacional Demócrata de Centro, que preside Aznar. ¿Es más cruz ir detrás de Mas o detrás de Aznar?

R. Yo no voy en una lista detrás de Aznar, y voy con mucho gusto en una lista detrás de Mas. Aznar y yo no tenemos el mismo proyecto político.

P. ¿Quién es el mayor pelota de Pujol en CiU?

R. Yo le digo las cosas tal como las siento. Pero no conozco su entorno más cercano, ni sé quién puede ser el más pelota, si es que lo hay.

P. Ya que parece que en la Generalitat no se comerá una rosca, ¿es cierto que le encantaría ser ministro de Exteriores?

R. No, no. Yo estoy encantado de ser lo que soy, que es casi nada. Cualquiera al que le hubiera explicado que podía llegar a ser diputado en Madrid, en Cataluña, en el Parlamento Europeo, consejero de Gobernación y vicepresidente de la Internacional me hubiera dicho que estaba loco.

P. ¿O sea que de mayor no quiere ser como Piqué?

R. Yo de mayor quiero ser como Duran.

P. ¿Su pretendido desapego a puestos en las alturas tiene que ver con su miedo al avión?

R. Mi miedo al avión es cierto. Siempre pido primera fila, pasillo. Y he superado el pánico a fuerza de volar cada semana, casi.

P. Mucho pánico, pero cada dos por tres se va a Cuba a comprar puros.

R. Cada dos por tres, no. Tres veces en mi vida. Lo que pasa es que tengo buenas amistades en Cuba, la gente sabe que me gustan los puros, y nunca me faltan.

P. ¿Qué hay de su fama de mujeriego?

R.Es que tengo cuatro mujeres en casa... Yo fui soltero durante muchos años, decían que soltero de oro. Ser una persona pública debía de comportar cierto atractivo. Pero eso ya se acabó.

P.¿Presume de pasear la mejor calva de Cataluña?

R. Creo que tengo la mejor calva de Cataluña, pero no presumo de ello.

P. Se castiga a diario con dos horas de gimnasio. ¿Le luce?

R. No es un castigo, es una virtud. Lo hago para encontrarme yo bien. Y si me luce tienen que decirlo terceros. Creo que tengo un cuerpo medianamente arreglado.

P. ¿Quién está más cachas: Artur Mas o usted?

R. Pues no he mirado las suyas. En todo caso, las mías no están mal.

P. Le he visto llenarse de fibras y potingues. ¿Son para ponerse estupendo?

R. Tomo fibra a diario porque tengo colon irritable. Y soja, calabaza y ajo. El ajo es bueno para la circulación de la sangre, y la calabaza, para la próstata. Todas, medicinas naturales.

P. Aparte de gustarle comer, ¿tiene virtudes culinarias, más allá del huevo frito?

R. Hago una tortilla de calabacín extraordinaria. Y caracoles, también.

P. ¿Maragall le duele a CiU?

R. Yo creo que Maragall tiene dolores en su propio partido. Y que su hora pasó. Nuestro problema no es Maragall. Somos nosotros mismos.

P. ¿Mas se lo comerá en las urnas?

R. Tanto como comer, no, porque sin duda Maragall debe de ser indigesto, como indigesto debo de ser yo; pero ganarle sí que le vamos a ganar.