Configurar cuentas en Windows XP

PERSONALIZACIONES

Cuando el ordenador personal, en el que está instalado Windows XP, se comparte con más personas, por ejemplo en con el resto de miembros de la familia o con otras personas de una oficina, siempre se piensa que cualquiera puede acceder a los documentos de los demás. Para evitar estas situaciones, XP dispone de una utilidad de configuración de cuentas de usuario que evita estos problemas. A través de ella, se pueden guardar la configuración y las preferencias personalizadas de cada uno, de forma que cada usuario que inicia la sesión se lo encuentra a su gusto, sin que esto afecte a los demás. Por el contrario, si mantiene un usuario único y todos los que acceden al ordenador utilizan la misma, los contenidos, configuraciones, preferencias y cualquier cambio que se haga, afectará por igual a todos.

Al utilizar cada usuario su cuenta el ordenador se arrancará más rápido, tendrá su propia lista de favoritos y de historial de visitas de Internet, el aspecto y contenido de la pantalla estará personalizado. Como, además, tendrá que introducir una contraseña para acceder a su cuenta, podrá asegurarse la privacidad de sus archivos.

Una ventaja adicional es la posibilidad de cambiar rápidamente entre usuarios sin necesidad de cerrar los programas que cada uno esté ejecutando. Por ejemplo, un usuario inicia la sesión y empieza a trabajar en el ordenador y, al cabo de un tiempo, un segundo usuario quiere leer su correo electrónico. Pues bien, haciendo clic en Inicio, Cerrar sesión de..., se puede cambiar de usuario, leer su correo y volver al usuario inicial sin que se haya alterado nada de cómo estaba.

CUENTAS DE USUARIO

La primera vez que se arranca Windows XP hay que hacerlo como Administrador. Si se introdujo una contraseña durante la instalación habrá que ponerla en este momento, si no se hizo, es muy recomendable que la primera acción sea la de adjudicarle una, ya que si no lo hace así, cualquiera podría acceder al ordenador y, además, no podrá configurar el resto de cuentas de los demás usuarios.

El Administrador es quien tiene los mayores privilegios de acceso. Todos los demás usuarios dependen de él, salvo que el propio Administrador sea el que les otorgue sus propios privilegios.

CREAR CUENTAS

Para añadir nuevas cuentas de usuario abra Inicio, Paneles de control, Cuentas de usuario, en el apartado Seleccione una tarea, haga clic en Crear una nueva cuenta. Déle el nombre del usuario que desea que aparezca y, en la siguiente pantalla, asígnele los privilegios que deba tener: el de Administrador de equipo o como cuenta Limitada. Observe que cuando coloca el cursor del ratón encima de una de las dos opciones, le aparecerán debajo los privilegios correspondientes.

ADMINISTRADORES

Los administradores pueden hacer cualquier cosa, desde crear y eliminar otras cuentas, hasta cambiarles el nombre, su imagen, contraseña y tipo. También pueden instalar y desinstalar todos los programas (software) y aparatos (hardware) conectados al ordenador. Incluso cambiar toda la configuración del sistema. Por ello, siempre es necesario que exista al menos una cuenta de administrador.

Las cuentas de usuario Limitadas sólo pueden cambiar o eliminar su contraseña, ver sus archivos y cambiar la imagen asociada a su cuenta. No podrán instalar prácticamente ningún programa nuevo y probablemente no le funcionarán los programas diseñados para funcionar con sistemas operativos anteriores a Windows XP.

También se puede habilitar otro tipo de cuenta, la de Invitado. Esta cuenta está pensada para accesos al ordenador de alguien que no es usuario habitual y que, de una manera esporádica, necesiten utilizar el ordenador. Por ejemplo, para acceder a Internet o escribir e imprimir algún documento, oir música, etcétera.

Si el sistema operativo es Windows XP Professional y está conectado a un dominio, existe otro tipo de cuenta llamado Estándar con privilegios para cambiar (o eliminar) su contraseña e imagen de cuenta y posibilidades de instalar y desinstalar software y hardware.

OPCIONES DE INICIO

Una vez creadas todas las cuentas, la forma en que aparece la pantalla de bienvenida y la forma en que se producen los cambios rápidos entre usuarios, se pueden cambiar. Siempre, claro está, que sea un administrador el que realice la acción.

Desde Inicio, Panel de control, Cuentas de usuario, seleccione Cambiar la manera en que los usuarios inician sesión. Las dos posibilidades estarán con su casilla correspondiente marcada. Si desea cambiarlas, simplemente quite la marca. Por ejemplo, si quiere que cada usuario deba escribir su nombre además de su contraseña, a la forma clásica, cuando el ordenador se arranque, deje sin marcar la casilla correspondiente. Si quiere desactivar el cambio rápido, deje sin marca su casilla. De esta forma todos los programas que estén en ejecución se cerrarán, de la misma forma que si hubiese apagado el equipo, antes de dar opción a la entrada del nuevo usuario.

RECORDAR CONTRASEÑAS

Uno de los problemas más habituales es olvidar la contraseña, sobre todo si se tienen que memorizar muchas. XP ofrece la posibilidad de crear un disquete para poder restaurar la contraseña si la olvida. De esta forma podrá crear una contraseña nueva para su cuenta e iniciar la sesión en el ordenador.

Los pasos son los siguientes: Inicio, Panel de control, Cuentas de usuario. Seleccione su cuenta y ábrala. En el apartado Tareas relacionadas, activar Prevenir el olvido de contraseñas. Se abrirá un asistente que en dos sencillos pasos le creará el disquete.