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Dos jueces condenan a Sevillana por caídas provocadas por arquetas en mal estado

Los fallos dicen que las empresas están obligadas a mantener su red

Dos juzgados malagueños han condenado a la compañía eléctrica Sevillana a pagar sendas indemnizaciones por caídas provocadas por arquetas en mal estado. La trascendencia de los fallos radica en los argumentos dados por los jueces: las empresas están obligadas a mantener sus instalaciones para evitar perjuicios a las personas. Sevillana replica que muchas arquetas son destrozadas por los coches que aparcan en las aceras o por obras.

Un caso es el de José J. G., que sufrió una fractura y contusiones al tropezar con el saliente de una arqueta, y otro, el de María del Carmen P. A., que resultó con lesiones por una tapa hundida. Los casos en sí son anecdóticos. Lo importante es el contenido de las sentencias. 'Una empresa que desarrolla una actividad lucrativa está obligada a mantener correctamente sus propias instalaciones, lo que requiere que vigile periódicamente el estado en el que se hallan para evitar que el deterioro de las mismas -que no aparece repentina sino progresivamente- sea susceptible de causar perjuicios', apunta el fallo del juzgado de 1ª instancia número 1 que condena a la compañía al pago de 20.381 euros por las lesiones causadas al hombre. Es más, señala que para cumplir ese objetivo no basta con acometer los cuidados reglamentarios sino que además son necesarios 'todos los que la producencia imponga para prevenir el efecto dañoso'.

En el mismo sentido se pronuncia el juzgado de 1ª instancia número 4 al darle la razón a la mujer y establecer una indemnización de 10.076 euros: 'Surge responsabilidad a pesar de cumplir la normativa vigente, si ello deviene inútil para evitar el efecto dañino'. En contra de lo que sostiene Sevillana, Damián Vázquez, el abogado que defendió a los afectados, insiste en que hubo 'dejadez' de la empresa, ya que las arquetas estuvieron bastante tiempo sin ser reparadas pese a que la compañía tenía conocimiento de su mal estado por la reclamación previa a la vía judicial.

José Antonio Ruiz, jefe comercial de Sevillana en Málaga, niega que exista negligencia y como ejemplo detalla que el año pasado, sólo en la capital se repararon 1.800 arquetas: 'Si hay algunas hundidas es porque los coches y los camiones de reparto aparcan en las aceras. O bien porque hay obras posteriores a la arqueta que hacen mal los cálculos y sobresalen o quedan hundidas'.

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