La Generalitat autoriza la construcción de un gran parque acuático en Castelldefels

Uno de los proyectos más controvertidos de los previstos en el municipio de Castelldefels (Baix Llobregat), el del parque acuático Llac Tropical de Ca n'Aymeric, verá finalmente la luz después del visto bueno de la Generalitat, aunque el Gobierno autónomo condicionará su desarrollo a que se dimensionen los lagos y estanques previstos, a que se potencien los sistemas de ahorro de agua y a que se mantenga la estructura de la pineda existente en la zona donde se ha proyectado, en la parte sur del municipio, en dirección al Garraf.

Las condiciones de la Generalitat nacen de las principales preocupaciones de los detractores de un proyecto que ha defendido el Ayuntamiento socialista de Castelldefels.

La primera de ellas es el impacto que el parque pueda tener sobre el ecosistema, y en particular sobre la pineda de la zona donde se ubicará. El efecto que podría tener el aumento de vehículos que se originaría en toda el área a raíz de la construcción es otra de las fuentes de inquietud, ya que se prevé que pasen por el futuro parque cerca de 4.000 coches cada día. El rechazo de parte de los vecinos fue tal que incluso una plataforma ciudadana llegó a denunciar el proyecto ante los tribunales. Entre los motivos que en los últimos meses han llevado a los ciudadanos de la localidad a manifestarse en la calle, figura este parque.

14,5 hectáreas de ocio

Finalmente, el Gobierno catalán se ha mostrado favorable a la creación del complejo, que en total se extenderá por 14,5 hectáreas y que constituirá una zona de ocio acuático con delfinario, área de bares y restaurantes, cines, bolera y minigolf.

La Comisión de Urbanismo, sin embargo, ha impuesto algunos cambios respecto al proyecto elaborado inicialmente, como el traslado de la zona de restauración, los multicines y la bolera previstos en los terrenos de una antigua cantera, a otra área que afectará a una pequeña zona de bosque. Sin embargo, fuentes del gobierno municipal aseguran que instarán a la empresa promotora a que afecte lo menos posible a esta área.

Otro de los cambios impuestos ha sido la reducción de las plazas de aparcamiento previstas, que pasarán de 1.800 a 1.200. El parque tendrá un acceso directo desde la autopista C-32 y se incorporará también al proyecto la reforma de la actual salida de Castelldefels Sud, con una rotonda elevada y un acceso directo a la playa.

Todos estos cambios serán sufragados por los promotores de este parque, que, según las autoridades, podría ser una realidad en el año 2003.