España se queja a Marruecos por la llegada masiva de menores a Melilla
La Embajada de España en Rabat entregó ayer al ministerio marroquí de Asuntos Exteriores una nota verbal que expresa la preocupación de las autoridades españolas por el problema humanitario creado por la llegada masiva de menores marroquíes a Melilla, según informaron fuentes diplomáticas. En la nota se ponen también de manifiesto los problemas que plantea la repatriación de estos menores marroquíes a su país.
El documento recuerda que el acuerdo bilateral de readmisión del año 1992 prevé que los menores devueltos deben ser reintegrados a sus familias o entregados a centros asistenciales de acogida, y pone de ejemplo que un mismo menor marroquí repatriado ha vuelto a entrar en Melilla hasta cuatro veces sucesivas.
España también plantea a Marruecos la necesidad de que Rabat incremente el control de sus fronteras para evitar flujos migratorios 'masivos e irregulares'.
Los centros de acogida de menores de Melilla se hacen cargo en la actualidad de alrededor de 180 marroquíes y, según el director de uno de estos centros, sólo siete de los 72 menores inmigrantes repatriados este año desde esa cuidad autónoma española hacia Marruecos se quedaron en su país. Los restantes regresaron a Melilla.
El ministro del Interior, Mariano Rajoy, declaró el miércoles en el Senado que Marruecos 'manifiesta una nula preocupación por el estado de sus menores', en contraste con las 'garantías' de tutela que se les ofrecen en España.
