'No jugamos a nada, yo el primero'

La mirada de desamparo es sólo una máscara en el rostro de Zidane. El crack francés del Madrid esconde su agresividad hasta que aflora, como en su autocrítica de ayer, cuando dijo rotundamente que el equipo se había hundido inexplicablemente ante la Real Sociedad justamente cuando necesitaba ganar los tres puntos para perseguir al Valencia en la Liga: 'El sábado jugamos mal, yo el primero. Fue un partido que no hemos jugado. Un partido sin nada. No jugamos a nada. Yo fui el primer culpable. ¿Por qué? No lo sé. Sólo sé que fue un fallo total. Lo sabemos. Ante Osasuna jugamos bien y perdimos. Contra la Real Sociedad, no. Tuvo más ambición que nosotros, más ganas. Nos dieron una paliza y no supimos gestionar el partido'.

La plantilla del Madrid volvió a entrenarse ayer después de la derrota (3-0) del sábado en Anoeta. La goleada recibida cargó al vestuario de tensiones. Los jugadores se sienten heridos en su amor propio, desconcertados y ansiosos. De pronto, el equipo que se anunciaba como máximo aspirante a ganar todos los títulos en disputa -la Copa, la Liga y la Liga de Campeones- va perdiendo oportunidades. Poco a poco, jornada a jornada, en un carrusel angustioso que parece llevar inexorablemente hacia un desenlace imprevisto. La Copa está perdida, la Liga se aleja en manos del Valencia y a la Copa de Europa no le queda lo más fácil. 'La Liga todavía no está perdida. Quedan seis puntos en juego', dijo Zidane; 'y la Liga de Campeones no está ganada. Queda la final. Y queda el partido contra el Barça, que hay que jugarlo y no será fácil'. 'El ambiente del Bernabéu será peor que el del Camp Nou', vaticinó Zidane ante el encuentro de mañana; 'en un sentido positivo, será como el día del Bayern'.

El esquema que prepara el entrenador, Vicente del Bosque, para recibir al Barcelona es netamente ofensivo. Según se pudo ver en el entrenamiento de ayer, dejará fuera del equipo titular a Pavón para introducir a Figo. Un central por un extremo. Pavón, el novato, por Figo, que regresa después de cumplir un partido de sanción en la ida. Esto conduce a un esquema de 4-4-2 en el que Hierro y Helguera volverán a ocupar el centro de la defensa. Makelele se situará en el medio centro como volante de contención, Solari lo apoyará por su izquierda y Figo jugará con más libertad por su derecha. Zidane dominará la media punta. La pareja de delanteros será la formada por Guti y Raúl.

Las lesiones de Morientes y Savio, ambos con contracturas musculares, son las únicas bajas de la semifinal hasta el momento.

'El miércoles, contra el Barcelona, tenemos que ganar como sea y pasar a la final', sentenció Helguera. 'Es muy difícil ganar en el Camp Nou y más en la Champions. Fue un resultado importante [0-2]. Hicimos un gran partido por mucho que mucha gente diga que nos defendimos demasiado. Cualquier equipo habría hecho lo mismo. Aquí [en el Bernabéu] va a ser diferente'.

Los jugadores se aferran a la condición de locales para expresar lo mejor del Madrid. Así esperan que sea contra el Barça, en sintonía con una temporada que ha sido brillante en Chamartín y lamentable fuera de casa. El Madrid ha perdido nueve partidos de la Liga lejos del Bernabéu. Una cifra que no se alcanzaba desde la temporada 1973-74, cuando Zoco, Santillana, Amancio y Pirri lideraban al equipo.