El PSPV no celebrará primarias en ciudades de menos de 50.000 vecinos

Los socialistas valencianos no celebrarán elecciones primarias para elegir candidatos en los municipios de entre 20.000 y 50.000 habitantes. Así lo decidió ayer la ejecutiva nacional del PSPV en la primera reunión celebrada tras el proceso de primarias que eligió al secretario general, Joan Ignasi Pla, como candidato a la presidencia de la Generalitat. En lo referente a las ciudades de más de 50.000 habitantes, la ejecutiva tratará de buscar 'el mayor consenso' y que en la designación de los candidatos prevalezca el 'interés social' antes que el 'interés particular', según precisó el vicesecretario del partido, José Luis Ábalos, que lanzaba así un aviso para que en la medida de lo posible se evite la convocatoria de elecciones primarias.

La decisión de no celebrar elecciones primarias en los municipios de entre 20.000 y 50.000 habitantes adoptada ayer por la ejecutiva del PSPV no afectará a muchas agrupaciones, según explicó Ábalos. El dirigente socialista precisó que las normas internas del PSPV dejan a la comisión ejecutiva nacional la potestad de autorizar la celebración de primarias en los municipios de ese tamaño que lo soliciten. 'Según las normas, pueden pedirlo, pero es potestativo de la ejecutiva el aprobarlas', dijo Ábalos. Respecto a las ciudades de más de 50.000 habitantes, el vicesecretario del PSPV dejó entrever que la dirección del partido prefiere que no haya primarias, para evitar choques entre familias que puedan debilitar a la organización.

Es lo que puede suceder en capitales como Valencia y Alicante. En la primera, donde la actual portavoz, Ana Noguera, quien parece contar con el respaldo de la ejecutiva federal del PSOE, probablemente tendrá que disputar el puesto de cabeza de lista con el secretario general de la comarca y concejal, Rafael Rubio. Y en la segunda, dos nombres propios y varios sectores de los socialistas alicantinos aspiran a recuperar para el PSPV la alcaldía de Alicante. El ex alcalde Ángel Luna tendría su foto en los carteles electorales si su oficiosa contrincante, la edil Carmen Sánchez Brufal, renunciara a competir con él en las elecciones primarias del partido.

Luna, que en estos momentos tiene a su favor a la dirección federal del PSOE, a la ejecutiva nacional del PSPV y al aparato del partido en Alicante, no acepta las primarias. Sólo si es candidato único se mediría al desconocido aspirante de la derecha -Luis Díaz Alperi, actual alcalde de Alicante, insiste públicamente en que no optará a la reelección-. A Luna, que se conjuga estos días en tiempo en condicional, aún le quedaría otra reserva. Fuentes muy cercanas a él sostienen que ante un eventual fracaso en las urnas el ex alcalde desearía asegurarse un escaño en las Cortes Valencianas. Una cautela que no adoptó en 1995, cuando el viento político sopló hacia el Partido Popular.

Oferta de Pla

Ahora las cosas son distintas. Sánchez Brufal reivindica su trabajo y enarbola la bandera de la renovación. Se siente respaldada por una parte de la militancia y, sobre todo, repudia algunas servidumbres de su secretario genereal, el senador Ángel Franco, quien ya ha tomado partido activo en favor de Luna. Joan Ignasi Pla, el líder del PSPV, que el domingo se reunió por separado con Luna y Sánchez Brufal, no ha podido convencer a la edil de que desista de optar a las primarias y ocupe el segundo puesto en el cartel socialista. Según fuentes próximas a la concejal, ésta ha visto despejado demasiado tiempo el camino, tanto que ahora, cuando se acerca la contienda y el aparato se ha puesto a trabajar, le es muy duro renunciar.