Un juez escocés anula la boda de conveniencia de dos paquistaníes

Un juez escocés anuló ayer el matrimonio forzoso que en 1998 unió a Aneeka Sohrab, que entonces tenía 16 años, con un joven de 19 años recién llegado de Pakistán, Raja Khan. Los padres de ambos se pusieron de acuerdo para casar a sus hijos. Aneeka, que se enteró de que se iba a casar una semana antes de la ceremonia, se opuso al matrimonio forzoso con un hombre al que ni siquiera conocía. Pero la presión de la familia, que la amenazó con enviarla a Pakistán si les deshonraba de esa manera, y el intento de suicidio de la madre, fueron argumentos suficientes para que la joven se casara con Raja en una mezquita de Glasgow.

El matrimonio duró poco y se separó a los pocos meses. Lord McEwan, juez del tribunal de Edimburgo, lo anuló ayer a petición de Aneeka Sohrab. El juez se declaró 'apenado de corazón' por la historia vivida por los dos jóvenes. El juez atribuyó el matrimonio de conveniencia a la gran influencia de ambas familias sobre sus hijos, y en particular, a las madres. Pero justificó la decisión de éstas no sólo porque no hacían más que prolongar una costumbre cultural por la que ellas mismas habían pasado, sino porque pensaban que estaban haciendo lo mejor para ellos. 'Sin embargo', añadió el juez McEwan, 'lo que ambas hicieron constituyó una presión intolerable para dos jóvenes a una edad en la que ninguno de ellos era capaz de tomar una decisión bien fundamentada sobre su futuro o actuar con independencia'.

Bashir Maan, representante en Escocia del Consejo Islámico británico, aplaudió la decisión. 'Bajo la sharía -ley coránica- no es válido un matrimonio decidido bajo presión o contra la voluntad específica de las dos personas', aseguró.