Effenberg carga contra los parados

Stefan Effenberg, ogro preferido de la afición alemana e incluso de sus colegas -el mexicano Hugo Sánchez alguna vez le calificó de 'payaso'-, se retractó ayer, aunque a medias, de sus polémicas declaraciones en la revista Playboy, publicadas la semana pasada. 'Por lo visto, mucha gente vive tan bien de cobrar el paro como para ya no tener ganas de levantarse temprano por la mañana y currar hasta la noche, sólo para, a finales de mes, tener 100 euros más en su cuenta', dijo Effenberg. Multiplicadas en el poderoso diario amarillista Bild -¡con cerca de 10 millones de lectores!- la arremetida de Effenberg, de 33 años, ha levantado muchas ampollas y conducido a que su equipo, el Bayern, le suspenda de forma temporal.

'Quiero dejar claro una cosa, porque es verdaderamente importante para mí: yo no me he referido a aquellos que realmente se esfuerzan, sino a los que reciben el subsidio del desempleo y no se esfuerzan', sostuvo ayer el jugador, cuyo sueldo mensual es de 330.000 euros al año, una suma equivalente a lo que cobran 458 desempleados, según las cuentas echadas por Bild.

La disculpa de quien durante años ha dirigido en el césped al Bayern, formulada en una entrevista en el diario Tz, tampoco va demasiado allá. A renglón seguido, Effenberg afirma que ha recibido mucho apoyo, tanto de ciudadanos de a pie, como de 'mandamases de la economía alemana'. 'Creáme, también en el club hay muchos que me dan la razón', agregó.

Entre estos, en todo caso, no se encuentra el gerente del Bayern, Uli Hoeness. 'Effenberg tiene demasiada poca relación con el problema del desempleo como para poner a hablarse de él', dijo ayer. Ni tampoco el más conocido hincha del club, Edmund Stoiber, primer ministro de Baviera y candidato conservador a la cancillería alemana: 'No debería hablar de lo que no entiende'. El fin de semana pasado su entrenador, Ottmar Hitzfeld, no le dejó jugar contra el Hertha de Berlín.