La capital pierde tirón ante las cámaras

Las dificultades que están teniendo los productores y directores de cine para rodar en la capital se ha notado en el balance municipal. La típica frase de 'motor, cámara, acción' se ha oído en el último año 3.721 veces en Madrid: un 15,3% menos que los 4.394 rodajes del año pasado. El aumento de las series televisivas grabadas por productoras españolas y el incremento de películas que han optado por tener como escenario la capital no ha permitido superar esas 4.394 peticiones tramitadas por la ventanilla única del Ayuntamiento de Madrid en 2000. Los productores aducen que tienen que superar muchas trabas para hacer exteriores en la ciudad. Muchos prefieren municipios de la periferia o incluso otras ciudades.

Los responsables de producción mantienen que el Ayuntamiento ha facilitado en los últimos años la solicitud de los permisos, pero, aun con todo, éstos son lentos y no permiten los cambios de última hora que a veces necesitan las series de televisión. 'Hemos visto cómo se cortaba la Gran Vía para que Tom Cruise y Penélope Cruz estrenaran una película, y a los jefes de producción nos cuesta cortar una simple bocacalle del distrito de Centro', se queja Emilio A. Piña, coproductor de la serie El comisario, que produce Boca Boca para Tele 5.

Las facilidades ya dentro de la grabación no resultan mejores. Piña recuerda que en poblaciones cercanas a Madrid agentes de Policía Municipal vigilan el rodaje y la seguridad de los actores y técnicos.

'Todos estaríamos dispuestos a pagar algo más si la policía protegiera la zona asignada. Ahora son nuestros propios trabajadores quienes, armados muchas veces con dos walkie-talkies, paran la circulación entre escena y escena', añade el productor de El comisario. 'Y eso que el tema ha mejorado muchísimo desde que se hizo cargo la tercera teniente de alcalde, María Tardón', apostilla.

Con antelación

El productor ejecutivo de Policías, serie que graba Globomedia para Antena 3, Manolo Valdivia, reconoce que sólo se puede grabar bien en Madrid cuando se trabaja con mucha antelación. Eso ocurre casi siempre en las películas, que no tienen tanta prisa en cerrar las escenas como en las series televisivas. 'Cuando hay imprevistos, y siempre los hay, no tenemos tiempo para negociar. Durante el año grabamos 26 o 27 episodios con exteriores y siempre hay problemas', asegura Valdivia.

El productor de Globomedia recuerda que han tenido que suspender las grabaciones tras producirse un atentado terrorista o un suceso de gran calado social: 'La coyuntura del momento hace que nos lo denieguen si hay persecuciones, explosiones o tiros en las calles', puntualiza. 'Alguna vez nos ha ocurrido que policías de verdad se han metido en el rodaje y han detenido a dos actores que acababan de atracar a un protagonista de la serie. Tuvimos que explicarles que se trataba de una serie de televisión', sonríe Valdivia. 'Siempre optamos por zonas céntricas, lugares que sean fáciles de reconocer por todo el mundo', añade.

Para rodar en Madrid hay que pedir un permiso y pagar unas tasas al Ayuntamiento. El departamento de ventanilla única, dependiente de la Tercera Tenencia de Alcaldía, se encarga de tramitar el permiso. Los cineastas tienen que especificar las calles elegidas, los días y el número de metros de vía pública que pretenden ocupar, así como el número de camiones transformadores y equipos de grabación. Las tasas el año pasado fueron de 53 céntimos por metro cuadrado y día.

El mes más cinematográfico en 2001 fue mayo (402 rodajes), seguido de febrero y octubre (399 cada uno). Por contra, los meses menos solicitados fueron los de verano: julio (164) y agosto (214). El tiempo medio de tramitación de los permisos fue de 10 días en el caso de parques públicos y de cinco en calles, según el Ayuntamiento de Madrid.

Los productores reconocen que otros municipios de la periferia son mucho más rápidos en tramitar las peticiones. Siempre ponen los ejemplos de Villaviciosa de Odón, Móstoles o Alcorcón. Entre sus ventajas están que se hallan cerca de la capital y que la policía suele vigilar los rodajes. En Alcorcón, por ejemplo, la ocupación de 100 metros cuadrados para rodaje cuesta 25 euros por día. También se necesita el visto bueno de la Policía Municipal, que se encarga de organizar los cortes de circulación en caso de que sean necesarios. La serie El comisario rodó 23 veces el año pasado en escenarios alcorconeros, según los datos de este Ayuntamiento.

'Otros sitios que son muy caros y difíciles son el aeropuerto, los lugares dependientes de Patrimonio Nacional y los autobuses de la EMT. Algunas jornadas pueden salir hasta por 4.800 euros, lo que supone una cifra muy alta para estas series', reconoce Emilio A. Piña.

De todas formas, estos precios y el esfuerzo de grabar en exteriores es 'el balón de oxígeno' que necesitan las series para ganar realismo, reconocen los productores. Salir fuera de los platós retrasa el ritmo de grabación, 'pero merece la pena'. En un día en los estudios se pueden grabar hasta 12 páginas de guión. Superar las cuatro en la calle supone muchas veces un reto.

Los actores son de la misma opinión de que los rodajes en exteriores dan calidad a la serie, pero reconocen que prefieren la intimidad del plató. Así lo explica el comisario Tito Valverde: 'La gente va a verte, ve cómo dices cosas, pero no llega a enterarse de lo que estás haciendo. Además, a veces te agobian tanto que te dan ganas de soltar un improperio, pero no puedes', añade el actor. 'Tardas mucho más en centrarte y muchas veces la gente hace gamberradas como meterse en escena o molestarnos. Por ejemplo, si en el plató grabamos ocho o diez escenas por día, en exteriores no pasas de tres o cuatro', admite.

'A sus órdenes'

Valverde ha vivido algunas anécdotas destacadas a raíz de ser un mando policial en la serie: 'Más de una vez se me ha acercado un policía de verdad: me enseña la placa y me empieza a hacer comentarios sobre el trabajo que hago. A veces incluso me han llegado a decir 'a sus órdenes'. En otras ocasiones, el director quiere aprovechar la última luz del día y tienes que correr mucho porque tienes un tiempo muy limitado. Entonces te cargas de demasiada responsabilidad. No te dan opción a equivocarte', dice.

Eso sí, reconocen que más de una vez rodar en exteriores les permite 'tomar oxígeno', como cuenta Juanjo Artero, el inspector Pope en El comisario: 'Siempre te agrada ir a rodar, por ejemplo, al pantano de San Juan y pasar un día entero, si hace buen tiempo'. De hecho, la meteorología es uno de los grandes riesgos que corren los rodajes fuera del plató. Si llueve, hay que suspender en más de una ocasión. En otras basta con adaptar el guión a las nuevas circunstancias. 'Otro problema que sufrimos es que en verano grabamos los capítulos de invierno, por lo que tenemos que ir con ropa de abrigo. En esos casos nos asamos. En los meses de frío ocurre lo contrario, y nos pasmamos de frío', relata Mar Regueras, la inspectora Lola de El comisario.