Eugeni Cabanes, director de Catalunya Ràdio pese a las presiones de Presidencia

El Departamento de Presidencia y la dirección de Convergència i Unió (CiU) estuvieron presionando hasta última hora de la tarde del jueves a Vicenç Villatoro, director general de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV), para que restituyera a Joan Maria Clavaguera como director de Catalunya Ràdio. Villatoro, consciente del escándalo que ello provocaría en la oposición y en el Consejo de Administración del organismo, optó por colocar al frente de la emisora a Eugeni Cabanes, un buen conocedor de los medios de la Generalitat.

Éste es el primer pulso que Villatoro mantiene, y gana, con el Gobierno catalán desde su nombramiento hace apenas dos semanas. Con la designación de Cabanes, un hombre muy próximo al ex director general de la CCRTV, Miquel Puig, del que fue jefe de gabinete, Villatoro se asegura el beneplácito del Consejo de Administración y de la izquierda parlamentaria. Pero a la vez, Cabanes, al situarse próximo a la órbita nacionalista -fue jefe de informativos de Catalunya Ràdio y TV-3, y jefe de prensa del ex consejero de Enseñanza Joan Maria Pujals- es un profesional bien visto por el Gobierno catalán.

Presidencia trató de restituir en Catalunya Ràdio a Clavaguera, cuya destitución, ejecutada por Miquel Puig, desagradó sobremanera al departamento que preside el conseller en cap, Artur Mas. El cese precipitó la dimisión de Puig, a mediados de marzo, y desembocó en una grave crisis en los medios de la Generalitat.

Muestra de la pugna que mantuvieron Villatoro y Presidencia es el hecho de que el primero no propuso a Cabanes que asumiera el cargo hasta una hora antes de comunicar su nombramiento al Consejo de Administración. Mientras que este órgano otorgó su confianza al nuevo director de Catalunya Ràdio, los trabajadores de la emisora se apresuraron a censurarlo.

Vuelve el apuntador tituló el comité profesional de la emisora un comunicado de protesta por la elección de Cabanes. Para los trabajadores de la emisora, esta incorporación supone 'un retorno a épocas pasadas, caracterizadas por el intervencionismo en la información'. Y lamentaron que la primera decisión de Villatoro como director general haya sido nombrar a una 'persona que no responde en ningún caso al perfil de un profesional independiente y libre de presión política'.

Cabanes se reunió con este comité, al que demandó un periodo de confianza para demostrar que su 'reto es el pluralismo', según manifestó a este periódico. El nuevo director ratificó a Jaume Peral como jefe de informativos.