Clos: 'Esperaremos los informes para decidir sobre el Born'
El alcalde de Barcelona, Joan Clos, manifestó ayer que 'el único acuerdo que hay entre las administraciones es esperar el informe arqueológico para conocer la calidad y la cantidad de restos [hallados en el Born] que se deben conservar'. En declaraciones recogidas por Efe, el alcalde dijo que las administraciones trabajan con la hipótesis de hacer compatibles los restos con la construcción de la biblioteca provincial, 'pero la respuesta definitiva surgirá tras conocer los informes', que estarán 'dentro de tres o cuatro semanas'.
Los arquitectos Enric Sòria y Rafael de Cáceres recibieron a finales de la semana pasada el encargo de estudiar la compatibilidad entre restos y biblioteca. Se han puesto a trabajar, pero no avanzan conclusiones. 'Ayuntamiento, Generalitat y Ministerio de Cultura han acordado solicitarnos un diagnóstico. Obviamente, aún no lo tenemos', manifestó Enric Sòria.
Un diario barcelonés señalaba ayer que combinar ruinas y libros en el Born es posible levantando el suelo de la biblioteca un metro por encima del nivel de la calle y situando los depósitos de libros en un solar exterior. 'Yo no he dicho nada de todo esto, justo ahora nos ponemos a trabajar'. Preguntado Sòria si, como se ha apuntado, la modificación del proyecto en aras de la compatibilidad puede significar un incremento del presupuesto del 25%, respondió: 'En este momento no puedo señalar qué incremento puede tener el presupuesto (...). Coderch decía que la arquitectura es silencio, no vocerío. Lo único que pido es trabajar con tranquilidad. Este tema ha generado opiniones envenenadas, incluso irritadas, y cuando eso ocurre más vale apartarse; de lo contrario, uno acaba sin poder dormir'.
La situación en estos momentos es la siguiente: el viernes 19 de abril concluyen las excavaciones en el primer nivel, el de la Barcelona medieval y del siglo XVIII, que ha generado la controversia. La próxima semana los arqueólogos tendrán listo un informe 'descriptivo, no valorativo', sobre el hallazgo, según las fuentes consultadas. A partir de ese informe los responsables del Museo de Historia de la Ciudad y del servicio de Patrimonio y Bibliotecas de la Generalitat emitirán un dictamen sobre qué hay que conservar.
Antoni Nicolau, director del Museo de Historia de la Ciudad, declaró ayer a este diario: 'Pese a que estamos a la espera del informe de los arqueólogos, durante este tiempo ya se ha ido explicando y valorando la importancia de los restos. Son fundamentales por muchas razones: por su estado de conservación; por su singularidad, ya que no existe ningún otro yacimiento de estas características en Europa que dé tanta información sobre una ciudad desde el siglo XIV al XVIII; porque son fácilmente legibles por todo tipo de público; porque tienen una gran capacidad de generar discurso histórico, al contar con abundante documentación, ya estudiada, y porque el Born es un espacio de un gran valor simbólico'.
La Sociedad Catalana de Arqueología, que reúne a más de 800 profesionales, ha presentado ante la Dirección General de Patrimonio de la Generalitat una petición para que los restos sean declarados Bien Cultural de Interés Nacional'. Asimismo, los arqueólogos participantes en el II Congreso de Arqueología Medieval y Moderna de Cataluña, que se celebra esta semana en Sant Cugat, redactarán un manifiesto a favor de la conservación.
El responsable de Patrimonio de la Generalitat, Marc Mayer, no pudo ser localizado ayer, pero es sabido que su postura es bastante menos entusiasta sobre la conservación de los restos que la de los responsables municipales. Un portavoz del Departamento de Cultura insitió en que la decisión última sobre la conservación la tomará la Generalitat, la cual, aseguró, desde el principio apuesta por la compatibilidad.
Demasiado retraso
También apuesta por ella la directora de la Biblioteca de Cataluña, Vinyet Panyella. 'Lo ideal es que los restos y la biblioteca sean compatibles. La biblioteca provincial lleva ya demasiados retrasos para que se añadan otros'.
Al preguntársele sobre la necesidad de una biblioteca de estas características, señaló: 'El mapa bibliotecario de la ciudad está incompleto sin ella. Debe actuar como biblioteca central, que es algo que ha venido haciendo en sustitución la Biblioteca de Cataluña, cuando la función de ésta es la de 'investigación de último recurso', como la calificamos técnicamente. Esto es, una biblioteca para investigadores, patrimonial, en la que se halla el ejemplar único que otras bibliotecas no pueden ofrecer'.
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