El BBV gestionó sus cuentas secretas a través de una fundación en Liechtenstein Texto íntegro del acuerdo del Banco de España para abrir expediente disciplinario a la entidad

El Banco Bilbao Vizcaya (BBV) gestionó cuentas secretas a través de una fundación domiciliada en Liechtenstein y de varias sociedades radicadas en el paraíso fiscal de la isla de Jersey. A través de ellas se hizo una serie de operaciones que arrojaron unos ingresos extraordinarios de 37.850 millones de pesetas (227,5 millones de euros). Estos ingresos fueron ocultados en la contabilidad de la entidad durante 13 años. El BBV regularizó esta situación con cargo al ejercicio de 2000, cuando ya se había fusionado con Argentaria para dar lugar al actual BBVA. Así consta en el acuerdo por el que el Banco de España decidió abrir expediente disciplinario al banco el pasado 15 de marzo y que EL PAÍS publica en su integridad.

La apertura de expediente disciplinario también se extendió a 16 personas que habían sido miembros de la Comisión Delegada Permanente, así como consejeros o altos cargos, entre los que figuran el ex presidente Emilio Ybarra y el ex vicepresidente y consejero delegado Pedro Luis Uriarte. Esta decisión tuvo lugar 14 meses después de la visita que hicieron Ybarra y el también presidente de la entidad, Francisco González, al gobernador del Banco de España, Jaime Caruana, el 19 de enero de 2001.

Fuentes del banco señalaron a EL PAÍS que el actual equipo directivo desconocía las operaciones reseñadas y destacan que procedieron a su regulación 'en cuanto tuvieron conocimiento de los hechos'. Asimismo, aclaran que de esos hechos 'no se deduce que se hayan destinado fondos al pago de actividades ilícitas y en ningún caso relacionadas con el terrorismo'.